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Por circunstancias que son materia de investigación, un ciudadano natural de República Dominicana escapó de las instalaciones del Aeropuerto José Quiñones Gonzáles de Chiclayo.
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A las 2 de la tarde del 20 de mayo, un vuelo proveniente de Panamá con 115 pasajeros aproximadamente aterrizó de emergencia en la Capital de la Amistad. Para ello se contó con el apoyo de la Policía de diversas unidades con la finalidad de salvaguardar la seguridad.
MALESTAR. En ese momento, personal de Migraciones indicó que dos de los viajeros identificados como Milagros Castellano de Genao (50), y Rigoberto Belén Díaz, de 22 años de edad, no acreditaban el perfil de turista, por lo tanto tenían que ser deportados a Panamá.
Mientras se daba la información señalada, Belén Díaz empezó a sentir malestar estomacal e incluso gritaba de fuertes dolores abdominales, tanto que se tiró al suelo haciendo creer a todos su presunto mal estado de salud.
Inmediatamente fue atendido por el médico del tópico del Aeropuerto, Juan Goicochea Venegas, quien determinó que debía ser trasladado al servicio de emergencia del hospital Las Mercedes.
Al llegar al mencionado nosocomio, el doctor de turno, Franklin Rivera Coronado, solo diagnosticó que se trataba de un dolor abdominal, por lo tanto, fue regresado al Aeropuerto Internacional.
El extranjero ha permanecido en la sede durante tres días bajo la custodia de la seguridad de la aerolínea
Sin embargo, a las 10 de la mañana de ayer, el jefe de Control de Servicios, a solicitud de la gerente y jefa de seguridad del aeropuerto, informó a los agentes del orden que Rigoberto Belén Díaz había fugado.
Según las investigaciones, el dominicano retenido trepó un cerco perimétrico de dos metros con 30 centímetros de altura, construido de adobe que está ubicado en la parte Nor Oeste - carretera hacia Pomalca.
Hallaron pisadas de zapatos, cuyas huellas quedaron al momento de escalar y escapar con rumbo desconocido.
