Lambayeque: Epsel está a poco de sumar una nueva denuncia

La paciencia se le termina a los vecinos de las urbanizaciones San Eduardo y Federico Villarreal, que temen sufrir las consecuencias de las fallas en la ejecución del colector primario de la avenida Víctor Raúl Haya de la Torre.

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En estos sectores hay quienes están a favor de que se interponga una denuncia en contra de la Entidad Prestadora de Servicios de Saneamiento de Lambayeque (Epsel) S.A. por la latente contaminación.

De acuerdo a la información que manejan los vecinos, el proveedor que, días atrás, proporcionó una motobomba para la extracción de aguas residuales se retiró por la falta de pago, y es por este motivo que los obreros habrían realizado una conexión clandestina para seguir con la evacuación.

Mientras esto se produce, el hedor en la zona sigue en aumento así como la preocupación por la formación de aniegos.

Problema

Los entrevistados para este informe responsabilizan a Epsel por los problemas. Explicaron que dicho organismo no actuó correctamente.

Asimismo detallaron que el actual gerente, Víctor Mondragón Villalobos, está brindando, a través de los medios de comunicación, información que no se ajusta a la realidad.

El plazo ofrecido por el gerente, para la culminación de los trabajos, es materialmente imposible de cumplir, como así lo demuestra el estado actual de la obra, la cual sigue paralizada en su ejecución y en el área se puede apreciar la existencia de un hoyo sobredimensionado con aguas servidas con olores fétidos, residuos sólidos acumulados, la invasión de roedores y mosquitos y zancudos transmisores de enfermedades.

El estado de contaminación perjudica el día a día de niños y adultos mayores.

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Intervención

En octubre del año pasado, Epsel dispuso intervenir económicamente en la obra conforme los estipula el artículo 174 del Reglamento de la Ley de Contrataciones del Estado, lo cual precisa que “la entidad puede, de oficio o a solicitud de parte, intervenir económicamente la obra en caso fortuito, fuerza mayor o por incumplimiento de las estipulaciones contractuales que a su juicio no permitan la terminación de los trabajos”. Esto sucedió con la finalidad de culminar la ejecución sin llegar a resolver el contrato. En ese contexto Epsel asumió prácticamente toda la responsabilidad. El proyecto demandará una inversión superior al millón de soles. Fue adjudicada a CVJ Contratistas Generales.

El gerente Mondragón aseguró que el desarrollo de la obra fue normal, hasta que en la primera valorización se detectó que la empresa registraba una deuda en Sunat por la suma de S/ 80,000.

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Agregó que el contratista debe más de un millón a la Sunat, por lo que al comprobarse la insolvencia, Epsel tuvo que intervenir y atender todos los problemas legales de este proyecto.

Se han aplicado penalidades por mora al consorcio, y lo que resta por finalizar es el trámite de la cuenta mancomunada.