Ambos estaban en su horario de servicio policial y debían estar patrullando todas las calles del distrito de Pomalca.
Ambos estaban en su horario de servicio policial y debían estar patrullando todas las calles del distrito de Pomalca.

A dos policías poco o nada les importó vestir el uniforme, peor aún utilizar el patrullero para acudir a beber licor, esto pese a que podrían recibir una grave sanción que acarrearía hasta la destitución.

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Se trata de los suboficiales PNP Kevin Guevara Benites y Frank Baldera Farro, quienes prestan servicio en la comisaría de Pomalca.

Ambos fueron intervenidos, la tarde del domingo, por sus colegas cuando se encontraban en una vivienda ubicada en la prolongación San Martín y la calle 25 de la mencionada localidad.

Servicio

Según el acta policial, ambos debieron estar patrullando las zonas más peligrosas del distrito; sin embargo, optaron por hacer abandono de su servicio para acudir al mencionado inmueble a beber licor.

Vecinos de la zona, indignados de verlos desde tempranas horas en el lugar, se armaron de valor en la tarde y se acercaron para increparles que debían estar trabajando en lugar de tomar bebidas alcohólicas con una fémina.

Asimismo, les increparon que el patrullero de placa de rodaje PF-18798 esté estacionado en el frontis del domicilio, como si fuera de uso particular.

El suboficial Guevara Benites, al verse rodeado de varios pobladores que le reclamaban su mal accionar, se enfrentó a uno de los moradores.

“Tú me has agredido, tú, tú, aquí están los testigos. Por qué me has metido un puñete”, le dijo un morador al policía ebrio.

En respuesta, el suboficial le dijo “no lo he agredido madre, lo que pasa es que él se ha puesto malcriado”.

La discusión se escucha en uno de los videos grabados por los vecinos, quienes también le señalan lo siguiente:

“Desde las 9 de la mañana se ha puesto malcriado. Jefe usted está en falta y así no son las cosas. Está con armas de guerra en el patrullero, uniformado. Ustedes piden respeto, pero si ustedes no respetan cómo quiere que la gente los respete a ustedes”.

En ese momento el efectivo llama desde su teléfono celular a un técnico PNP que sería de la guardia de la delegación, para pedir apoyo.

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Intervención

A los pocos minutos llegó el personal policial y se percató que uno de los suboficiales estaba afuera y el otro en el interior. Los dos presentaban visibles síntomas de ebriedad, por lo tanto procedieron a detenerlos, mientras los moradores explicaban el mal accionar de sus colegas.

Fueron trasladados hasta la delegación, donde el comisario Ronald Raymondi Medrano puso de conocimiento el hecho ante la Oficina de Disciplina de la Policía y al oficial de ronda diurna Mayor PNP Giomar Zalon Villacres, a efectos que realicen las acciones conforme a sus atribuciones y funciones.

Hasta la sede policial también llegaron representantes de Inspectoría PNP regional, quienes ordenaron que Kevin Guevara Benites y Frank Baldera Farro pasen el respectivo dosaje etílico, cuyo examen cualitativo arrojó positivo.

Según el Decreto Legislativo que regula el Régimen Disciplinario de la Policía Nacional del Perú, “el personal policial que consuma drogas o bebidas alcohólicas durante el servicio policial su pase al retiro será de forma inmediata”.

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