Taxista se opone al robo de su vehículo y es baleado
Taxista se opone al robo de su vehículo y es baleado

Una pareja de delincuentes dejó gravemente herido a un joven taxista, tras dispararle dos veces en el cuerpo, por el simple hecho de resistirse al robo de su única herramienta de trabajo, en 

Se trata de Luis Junior Paiva Sánchez, de 26 años de edad, quien fue derivado de emergencia hasta una clínica particular de la Capital de la Amistad.

ASALTO

Según la información policial, el atraco se registró ayer en horas de la tarde, cuando el agraviado realizó un servicio de taxi a una pareja (hombre y mujer) sin imaginar que se trataba de dos delincuentes.

Estos facinerosos lo captaron en el centro comercial Real Plaza y le solicitaron la carrera hasta el distrito de Pomalca.

Una vez en el lugar pidieron al chofer que ingrese hasta el sector El Invernillo, donde procedieron a cometer su atraco. Allí, uno de ellos sacó a relucir un arma de fuego, mientras que ella le exigía que baje de la unidad.

Sin embargo, Paiva Sánchez se les enfrentó sin medir las consecuencias, puesto que le pudo haber costado la vida.

Primero se lío a golpes, pero los ladrones no dudaron ni un segundo en responder baleándolo a quemarropa. Uno de los proyectiles le impactó en el brazo derecho y otro en el abdomen.

Antes de que los pobladores de la zona se percataron de lo sucedido, los malhechores emprendieron veloz fuga con rumbo desconocido, no sin antes llevarse el celular y dinero del agraviado, de todas las carreras del día.

No lograron robar el vehículo de placa B3Z-468. Lo dejaron abandonado junto al taxista.

Minutos después, un mototaxista que pasaba por el lugar, al percatarse del herido, rápidamente lo condujo hasta la comisaría de Pomalca; siendo los policías quienes lo llevaron a un nosocomio.

Los suboficiales en ese momento ejecutaron un operativo logrando capturar horas después a los sospechosos del asalto identificados como Jimmy Maza Huamán (20) y Patricia Mirella Velásquez Quevedo (22). Ellos viven en Pomalca y tenían en su poder la billetera del agraviado.

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