Fotos: Mario Zapata N. / @photo.gec
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El nuevo terminal del aeropuerto Jorge Chávez inició operaciones con fallas críticas en seguridad, control migratorio y coordinación logística, según denunció Carlos Gutiérrez, gerente de la Asociación de Empresas de Transporte Aéreo Internacional (AETAI).

Las aerolíneas reportaron congestiones, retrasos y riesgos operativos que podrían agravarse en temporada alta si no se corrigen con urgencia.

Uno de los principales inconvenientes fue el nuevo sistema de control de seguridad, que reemplazó los arcos tradicionales por filtros tipo “turbinas”, generando largas colas.

Gutiérrez explicó, en diálogo con Canal N, que la transición tecnológica no incluyó una socialización adecuada con los usuarios, lo que retrasó los procesos.

En migraciones, el espacio reducido para salidas internacionales provocó cuellos de botella. AETAI señaló que la capacidad del área disminuyó un 20% frente al terminal anterior y recomendó a los pasajeros usar el aplicativo Migracheck —que permite registrar datos con 48 horas de anticipación— para acceder a los e-Gates y evitar demoras.

Falta de pruebas y descoordinación logística

Gutiérrez criticó la falta de simulacros reales previos con 2,000 a 4,000 pasajeros, pese a las advertencias del sector. La “marcha blanca”, realizada con solo cuatro aerolíneas, fue insuficiente para detectar fallas.

Durante el primer día, hubo desabastecimiento de combustible y retrasos en vuelos por falta de personal capacitado.

Además, el gerente de AETAI cuestionó que una controladora vinculada al accidente aéreo de 2022 haya estado involucrada en un incidente reciente con un vuelo de Copa Airlines, urgiendo una investigación.

AETAI propuso incrementar orientadores, mejorar señalética y ajustar los sistemas antes de la temporada alta.

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