El 1 de junio de 2025 quedará registrado como el día en que el nuevo aeropuerto Internacional Jorge Chávez abrió sus puertas para dar inicio a una nueva era en el Perú.
La moderna infraestructura de 935 hectáreas con tecnología que permitirá atender hasta 40 millones de pasajeros al año, también será el nuevo espacio donde se escribirán emotivas historias de despedida y recibimiento de familiares.

PREVIOS
Casi a la 1:00 a.m. de ayer se apagaron de manera definitiva las luces del viejo terminal ubicado en la avenida Elmer Faucett, para dar pase a una nueva era.
Antes del apagado de luces se registró un peculiar incidente, pues un pasajero del último vuelo que tenía como destino Argentina y hora de despegue a las 11:50 p.m., llegó tarde.

La puerta 24 del embarque ya había sido cerrada cuando el hombre llegó agitando su ticket en mano. “Falta uno”, gritó alguien desde el público.
Tras varios minutos de angustia y arengas de personas a su favor, lo dejaron subir a la aeronave.
Por la mañana sería el turno del nuevo aeropuerto.
Si bien el acceso estaba permitido desde las 8:00 a.m., no faltaron los que llegaron casi a las 7:00 a.m. para conocer el aeropuerto, aunque fueron impedidos de ingresar por personal del terminal.

Al respecto, Carolina Rubio, vocera de Lima Airport Partners (LAP), dijo en RPP que si bien se recomienda a los pasajeros ir con dos horas de anticipación (para vuelos nacionales) y tres horas (para vuelos internacionales), sería conveniente añadir una hora más, porque tomará un tiempo adecuarse a las rutas externas.
En el mismo sentido se pronunció Ricardo Acosta, presidente de la Asociación Peruana de Agencias de Viaje y Turismo.
“Evidentemente habrá congestionamiento. Personalmente aconsejo a las personas que salgan con cinco horas de anticipación de su vuelo para no tener problemas”, estimó.

EN VERDE
La primera aeronave en aterrizar a las 13:00 horas en el nuevo terminal ubicado en la Avenida Morales Duárez fue un vuelo internacional de Iberia, procedente de Madrid, España, con 233 pasajeros.
Como parte de una tradición, la aeronave fue recibida con un arco formado por chorros de agua que provenían de dos unidades de bomberos aeronaúticos.

El ciudadano peruano Sebastián Iglesias se convirtió en el primer pasajeros en cruzar las puertas de desembarque.
RPP registró historias de ese vuelo. Por ejemplo, un padre de familia y su esposa esperaron la llegada de su hija que fue a trabajar a Madrid hace ocho meses.
También contaron la historia de una tía que espera el regreso de su sobrina a quien no ve desde hace un año, pues vive en Madrid.
La familia la recibió con una pancarta y dulces.
Además, una mujer fue acompañada de sus dos mascotas para recibir a su hijo.
Por otro lado, el primer vuelo de salida comercial partió a la 13:10 p.m. con destino a Atlanta, Estados Unidos, operado por Latam Airlines Perú, un vuelo con una capacidad para 233 personas.

Más temprano, el superintendente nacional de Migraciones, Armando García, estimó que entre la 1 y 2 de la tarde, el nuevo terminal atendería en promedio 21 vuelos, 10 correspondientes a arribos internacionales y 11 salidas.
En esa ventana se prevé el mayor pico de afluencia de pasajeros.
Y si bien el nuevo aeropuerto se llenó de halagos, también de críticas, pues el terminal tiene pendiente mejorar el acceso para los pasajeros, pues muchos consideran que existen limitaciones para los viajeros.