Durante la madrugada de este lunes, un explosivo fue detonado en la puerta principal del colegio privado Gran Amauta de Motupe, que se encuentra en el distrito de San Juan de Lurigancho.
El ataque ocurre en pleno Estado de Emergencia declarado en el distrito, y justo en el día que se esperaba el retorno a clases presenciales tras semanas de modalidad virtual debido a amenazas previas. La detonación dejó severos daños en la infraestructura del centro educativo, incluyendo vidrios destrozados por la onda expansiva.
Según Exitosa Noticias, el director del colegio venía recibiendo amenazas desde marzo, coincidiendo con el inicio del año escolar. Los extorsionadores exigían 20 mil dólares a cambio de no atentar contra la institución. Ante el riesgo, el colegio optó por suspender las clases presenciales y mudar a una modalidad virtual. Además, el propio director tuvo que abandonar la vivienda que ocupaba en el recinto educativo.

Vecinos de SJL en alerta
Los padres de familia y vecinos expresaron su profunda preocupación por el atentado, que afecta a cerca de 400 alumnos de los niveles inicial, primaria y secundaria. La indignación aumentó porque, a pesar de la gravedad del ataque, las autoridades no se presentaron en el lugar hasta varias horas después.
“Obviamente las clases empezaron las primeras semanas de marzo. Solo duraron una semana presencialmente y luego se suspendieron. Hoy se suponía que se reanudaban las clases presenciales, pero justo hoy a las 2:05 de la mañana detonan esta granada”, relató una madre preocupada a Exitosa Noticias.
Los vecinos también denunciaron que no es un hecho aislado: otros negocios como una pollería y una cevichería en la zona también son víctimas de extorsión, con cobros ilegales para permitirles operar con tranquilidad.
“Estamos muy cansados de todo esto. No es la primera vez. Aquí es tierra de nadie”, lamentó una vecina del sector.
Investigación en curso
Las imágenes captadas por cámaras de seguridad cercanas al colegio serán clave para identificar a los responsables del atentado. La Policía Nacional del Perú había prometido brindar seguridad al centro educativo, especialmente en los horarios de ingreso y salida de los escolares, pero el atentado ocurrido esta madrugada pone en entredicho las medidas adoptadas.
Hasta el momento, no se ha emitido un pronunciamiento oficial sobre los avances en la investigación ni sobre acciones inmediatas para reforzar la seguridad en el sector.