La criminalidad desbordada. Una mujer fue ejecutada a balazos cuando participaba en una actividad social que se realizaba frente a su vivienda, en la calle Tarata, en el distrito chalaco de La Perla.
Jessica Graciela Cáceres Palacios (50) se encontraba con amigos y familiares, cuando dos sujetos extranjeros le dispararon por lo menos seis balazos a quemarropa, matándola en el acto. El crimen ocurrió con total impunidad la tarde del último sábado, pese al estado de emergencia que rige en Lima y Callao.
Se supo los dos asesinos llegaron al lugar a bordo de una misma moto lineal, y en cuestión de instantes desataron la lluvia de balas, sin mediar palabras. Escaparon de la zona a toda velocidad, señalaron algunos testigos.
Ajuste
El crimen responde a un caso de ajuste de cuentas del hampa, apuntaron las primeras hipótesis de la Policía Nacional.
La institución sustenta esta tesis en el hecho de que Jessica Graciela Cáceres Palacios cuenta con antecedentes y una requisitoria pendiente por presunto homicidio.
Los familiares y amigos de la víctima se mostraron muy cerrados y evitaron declarar a los medios sobre las circunstancias del ataque.
No obstante, algunos vecinos señalaron que su vecindario se ha vuelto muy peligroso.
“Hace falta más presencia policial en las calles”, afirmaron y demandaron la intervención de las autoridades.
Agentes de la Policía cercaron la escena del crimen e iniciaron la recolección de las imágenes de las cámaras de seguridad del lugar para identificar a los responsables.
Horas antes del ataque, la presidenta Dina Boluarte había afirmado que todas las motos que se desplazaban con dos ocupantes iba a ser detenidas y llevadas al depósito.