Tomadas de las manos y a una sola voz, un grupo de mujeres que salieron a las calles a protestar contra la agresión que sufrió Eyvi Agreda al interior de un bus en Miraflores, el último martes, y por los casos de violencia de género que se denuncian a diario en el país, fueron reprimidas por la Policía a la altura de la avenida Colmena, en Cercado de Lima.
Las manifestantes fueron dispersadas con gases lacrimógenos. Los efectivos, en su intento de poner orden, lanzaron violentamente estos químicos en unas ocho oportunidades, afectando a las decenas de mujeres que participaban de esta protesta pacífica y demás personas que se encontraban alrededor de la zona.
Además, la Policía detuvo sin motivo a uno de los manifestantes, identificado como Christopher Reyes Liñan, quien además se desempeñaría como bombero. El joven fue trasladado a la comisaría de Alfonso Ugarte.
Los altos índices de feminicidio y violencia hacia la mujer en el país, las impulsaron a salir a las calles. Evidentemente, indignadas y mortificadas, las manifestantes expresaron su sentir, demandaron a las autoridades sanciones drásticas para los agresores y a la población que tome conciencia de la alarmante situación.