Omar Garay fue dado de alta el 22 de marzo, pero los dolores continuaron. Días después supo que le habían administrado un suero con alerta sanitaria. Hoy reclama justicia y respuestas por parte de Medifarma y la clínica.
Omar Garay fue dado de alta el 22 de marzo, pero los dolores continuaron. Días después supo que le habían administrado un suero con alerta sanitaria. Hoy reclama justicia y respuestas por parte de Medifarma y la clínica.

Lo que debía ser una intervención rutinaria en la clínica Sanna de San Borja terminó en una experiencia dolorosa y llena de incertidumbre para Omar Luis Garay Campomanes. El joven ingresó el 19 de marzo y fue dado de alta el día 22, pero los malestares persistieron hasta el 27, cuando fue notificado de que le habían aplicado un suero defectuoso producido por el laboratorio Medifarma, actualmente bajo alerta sanitaria.

Garay afirma que hasta el momento no ha recibido atención, seguimiento ni explicaciones de parte de la clínica.

Silencio institucional y falta de transparencia

La clínica Sanna, al ser consultada sobre el caso, indicó que no tenía personal disponible para brindar declaraciones, según informó América Noticias. Mientras tanto, el testimonio de Omar ha encendido las alertas entre otros posibles afectados por el mismo lote de suero, cuyos efectos adversos aún están bajo evaluación por parte de las autoridades sanitarias.

Garay exige que Medifarma y la clínica asuman su responsabilidad. Este caso se suma a una serie de cuestionamientos sobre la calidad de productos médicos y los protocolos de seguimiento en centros de salud privados. Para el paciente, compartir su testimonio busca evitar que otros pasen por lo mismo.

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