3800 policías en estado de alerta máxima por desalojo

Hora Cero. Desde la tarde de ayer un aproximado de 3800 efectivos policiales se mantienen en alerta máxima y con orden de inamovilidad absoluta en Piura, por el anunciado desalojo de los comerciantes informales del Complejo de Mercados.

El estado de alerta fue decretado por el comando policial desde las 17:00 horas del viernes.

La medida incluye la suspensión indefinida de descansos, permisos y vacaciones y se dispuso que el personal que estuvo ayer de servicio y hoy goza de su día de franco, estará en calidad de “retén” en su respectiva unidad policial, según fuentes del despacho del coronel PNP Beltrán Córdova, jefe de la Divpol Piura.

Con eso, se echó a andar la cuenta regresiva para la operación conjunta de la Municipalidad de Piura y la Policía Nacional, destinada a recuperar los espacios públicos actualmente invadidos por los ambulantes.

Aunque no se tiene certeza sobre la “Hora cero” para dicha operación, todo apunta a que esta tarde (5:00 pm) el fuerte contingente policial tomará su desplazamiento en los alrededores del principal complejo comercial de la ciudad de Piura.

Seguridad en cifras. En cifras, suman 2 mil 100 los efectivos policiales movilizados hacia esta ciudad desde las distintas unidades operativas de Lima, Huaraz, Tumbes, Lambayeque y la región La Libertad.

Estos refuerzos de sumaron a unos 1700 hombres de las fuerzas del orden que prestan servicio en el ámbito de la Región Policial Piura.

Los efectivos, entre los que se cuentan unos 300 comandos de la Dirección Nacional de Operaciones Especiales (Dinoes) y otros mil de control de motines (USE), comenzaron su arribo desde las primeras horas del día y anoche pernoctaron en la sede de la Región Policial, comisarías y distintas unidades de la PNP.

Un contingente de la Dinoes, el último en llegar a Piura, fue instalado en el cuartel de la Compañía de Bomberos del Centro Histórico de la ciudad.

bajo resguardo. Las fuerzas policiales serán desplegadas hoy en los mercados zonales, centros comerciales, grifos, arterias principales y puntos críticos de los distritos de Piura, Castilla y Veintiséis de Octubre.

Por su parte, el recién inaugurado Mercado San Miguel será objeto de resguardo especial, debido a reportes de inteligencia de última hora de que este centro de abasto podría ser blanco de atentados por los informales que se resisten al desalojo.

Se conoció que tanto en el

mercado, como en toda la ciudad, el despliegue de las avenidas estará bajo responsabilidad de un mayor de la PNP, mientras que los coroneles se harán cargo de las calles. Estos oficiales actuarán bajo la supervisión de comandantes.

El mayor contingente tomará control del Complejo de Mercados y de sus alrededores, a fin de garantizar el ingreso de la maquinaria que desalojará un total de 2 mil 175 puestos instalados sobre la vía pública.

NO SE MUEVEN. A solo horas del desalojo, los comerciantes informales de la calle Blas de Atienza se mantienen aún en sus puestos, a diferencia de los informales del jirón Gonzalo Farfán que ayer seguían trasladando sus pertenencias al nuevo mercado San Miguel.

En la calle Blas de Atienza, los informales de los diferentes rubros continuaban atendiendo como de costumbre, incluso algunos puestos lucían embanderados, sin que se vislumbre la intención de que se retiren.

EN LA MIRA. El administrador del flamante mercado San Miguel, César Castillo, confirmó que ante el inminente desalojo se redobló la seguridad en torno a este complejo donde se han instalado alrededor de mil 100 comerciantes.

“Cuando hay un desalojo, se trata de proteger a los mercados zonales, pero en esta ocasión se brinda especial atención al mercado San Miguel, que está en la mira y el jefe de la policía nos ha indicado que el día de la recuperación de las áreas públicas del complejo de mercados debe haber cero comerciantes por medidas de seguridad”, dijo.

Llamado de precaución. De igual modo, César Castillo recomendó a los comerciantes del nuevo centro de abasto que hoy no abran sus puestos como medida de precaución, hasta que concluya la operación de limpieza en el Complejo de Mercados.

Esto debido a los rumores que circularon ayer de que quienes se oponen al desalojo tendrían balones con gas que podrían hacer estallar, además de conocerse que han sido contratados numerosos maleantes para que los secunden en su intento de resistirse.

Señaló que la municipalidad está apoyando con un equipo, incluidos soldadores y técnicos provistos de molas que facilitarán el desmontaje de las estructuras metálicas del jirón Gonzalo Farfán.

APLICARÁN LA LEY. Por su parte, el gerente de Servicios Comerciales de la Municipalidad de Piura, Humberto Toro, señaló que con la llegada de los refuerzos policiales, el desalojo “ya es un hecho”.

“La policía está tomando las providencias del caso y si los informales pretendieran algún acto de vandalismo, les caerá todo el peso de la ley”, expresó.

El funcionario se mostró confiado en que amanecerá una nueva semana, “en la que impere el orden y se empiece a limpiar todo el Complejo de Mercados y podamos recibir a la curia del país, que vendrá para el Congreso Eucarístico”.