Avizoran una solución a obra emblemática abandonada
Avizoran una solución a obra emblemática abandonada

Desde el año 2015 que se anunció el inicio de la construcción del colegio emblemático Carlos Augusto Salaverry de , los trabajos apenas presentan 40% de avance físico.

Mientras la obra está abandonada, los alumnos estudian en ambientes prestados en la institución educativa Amauta, en el mismo Sullana, soportando la inclemencia del clima, el polvo y la falta de adecuados servicios higiénicos.

Son alrededor de 1500 alumnos del nivel primario y secundario quienes pasan las de Caín, estudiando en aulas prefabricadas que se erigen en medio de un pampón en la parte posterior del colegio Amauta que los alberga desde el 2015, fecha en que se inició la obra.

POR “PUCHOS”

Pero no todo es malo para los alumnos del colegio emblemático, señala el director José Córdova, puesto que el Programa Nacional de Infraestructura Educativa (Pronied) se ha comprometido a retomar y mejorar los trabajos abandonados mediante la elaboración y licitación del saldo de obra, para culminar el 60% de lo que falta de la obra, o sea, más de la mitad.

El expediente del saldo de obra tendrá en cuenta el componente antisísmico que no se consideró en el primero, así como el techado de la piscina y alumbrado de la cancha deportiva.

El proyecto también comprende un espacio de socialización en armonía con el medio ambiente mediante el sembrado de árboles de distintas especies que generen la idea de un bosque dentro de la institución.

“En esta última visita que hemos realizado a la ciudad de Lima, el Pronied está haciendo muchas mejoras al expediente técnico que primero no se tenían. Creo que valió la pena esperar”, indicó el director de la institución educativa.

Todo esto representa una esperanza para los alumnos, plana docente y personal administrativo de dicho colegio, que este 14 de julio cumplirá 73 años de creación.

EN OCTUBRE

De acuerdo con el cronograma de plazos establecidos por el Ministerio de Educación, se prevé que entre setiembre y octubre se retomen los trabajos de la obra paralizada.

Por lo pronto, el Pronied viene ultimando detalles de lo que será el saldo de obra del expediente técnico que deberá estar terminado y licitado en el mes de julio.

El Pronied tendría pensado terminar este colegio por etapas. La primera etapa comprende el área pedagógica y deberá culminarse en un promedio de cinco meses a partir de iniciado los trabajos. Después de este tiempo, los alumnos estarán en condiciones de regresar a sus aulas terminadas, dado que el colegio nuevamente abrirá sus puertas aproximadamente en el mes de marzo del próximo año.

La segunda etapa comprende el polideportivo, la piscina y la cancha deportiva. En total, la obra, según calculos esgrimidos por la dirección del colegio, tendrá una duración de once meses.

También se tiene pensado reforzar un pabellón, que en su momento fue observado, para que pueda ser utilizado.

VISITA DEL PRONIED

Se informó que la primera semana del siguiente mes, un equipo técnico del Pronied hará una visita a Sullana, para informar a la ciudadanía, sobre todo a los padres de familia, sobre el proyecto educativo del Carlos Augusto Salaverry.

Desde ya, la llegada de los especialistas ha generado mucha expectativa entre los padres, alumnos y plana docente de la institución, quienes esperan ver terminado su colegio.

“En esta visita esperamos que el Pronied informe a la comunidad y a los interesados los avances del expediente para dar claridad al proyecto”, sostuvo el director.

MESA TÉCNICA VIGILANTE

Dicho colegio cuenta con una Mesa Técnica que hace seguimiento a lo ofrecido por el Estado. En ese sentido, los padres de familia, dirección y demás instituciones miembros de esta mesa asumirán un papel fiscalizador para recibir una obra de calidad dentro de los plazos ofrecidos.

“Nosotros siempre hemos estado pendientes de la obra. El año pasado formamos un comité que cada mes entraba a obra. Ese comité sigue hasta la fecha y cuenta con la participación de la municipalidad de Sullana. Incluso con ellos (funcionarios) hemos viajado a Lima y las mejoras de este proyecto es producto de esa visita”, manifestó José Córdova.

EQUIPAMIENTO

El Ministerio de Educación, asimismo, se ha comprometido a equipar dicho colegio con mobiliario y equipos electrónicos, según lo explicó el subdirector del colegio, Ramón Cornejo Chumacero.

Indicó que por ahora el ente apoyó con 700 módulos para el nivel primario, que consisten en sillas, mesas y armarios.

Falta equipar los talleres técnicos y las aulas del nivel secundario, además de implementar cuarenta aulas nuevas con setenta laptops de última generación, explicaron.

ANTECEDENTES

Pese a los ofrecimientos, los interesados aún no pueden cantar victoria, por cuanto han tenido que pasar cuatro años y muchas desaveniencias para que los funcionarios del Pronied retomen la obra abandonada.

Como es sabido, en el 2015 el consorcio CANRI inició la construcción del colegio en Sullana, y dos años después abandonó los trabajos al 31% de avance físico.

En el 2017, el Pronied licitó este proyecto mediante un saldo de obra, resultando ganador el consorcio H&H.

De acuerdo con el Pronied, que realizó una visita el año pasado a la obra, los trabajos presentaban apenas un avance físico del 38% frente al 88% de avance programado.

Los constantes atrasos e incumplimiento del cronograma acelerado de obra, así como la falta de liquidez para financiar los trabajos restantes, acarrearon la paralización del proyecto.

Finalmente, en octubre del año pasado el Pronied rescindió contrato con la empresa y en simultáneo activo un plan de mitigación para mejorar las condiciones de los ambientes del colegio Amauta, que alberga a los salaverrinos.

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