Más de 300 colegios de Piura con daños severos deberán afrontar el impacto de El Niño Global

Carmen Sánchez, directora de la UGEL, afirma que en la región Piura existe un aumento de las deficiencias en la infraestructura de los centros educativos

Actualizado el 04/07/2023, 11:31 a.m.

El silencio reina en muchas instituciones educativas en Piura. Donde antes existía un lugar lleno de vida, ahora solo quedan salones vacíos sin propósito. Carmen Sánchez, directora de la UGEL Piura, estima que existen 300 instalaciones con deficiencias en la región Piura, de las cuales 183 han presentado su ficha de evaluación de daños y análisis de necesidades (EDAN) y de esa cantidad solo 80 han sido reconstruidas y entregadas en las condiciones adecuadas.

En muchos casos, la solución ha venido impuesta por la urgencia: trasladar a los estudiantes a espacios improvisados o saturar otros centros con estudiantes. “El traslado temporal de alumnos a otros centros educativos es el plan de contingencia más conveniente para no interrumpir su educación”, asegura Sánchez.

El panorama es desalentador. Por ello, intentamos conseguir sin éxito las cifras sobre la cantidad de alumnos que son afectados por estos planes de contingencia en toda la región. Nos comunicamos con la Dirección Regional de Educación de Piura (DREP) y con el Programa Nacional de Infraestructura Educativa (Pronied) a través de sus canales de comunicación y encargados de imagen. Respondieron que aún no cuentan con la información exacta.

César Orrego Azula, jefe de la Oficina Defensorial de Piura, explica que existen tres factores principales para el deterioro de la infraestructura de un colegio: la falta de financiamiento, las condiciones climáticas y el uso inadecuado de las instalaciones.

La falta de financiamiento por parte del Gobierno Regional para el mantenimiento de una institución, muchas veces ocasiona que se presente un desgaste en las instalaciones y materiales.

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Las condiciones climáticas también causan daños en los colegios, en particular, las lluvias, ya que afectan al sistema eléctrico y a elementos estructurales. Sumado a ello, Orrego hace hincapié en el uso inadecuado por parte de algunos alumnos y personal como otro factor a considerar.

Orrego estima que, en todo el país, son necesarios 100.000 millones de soles para cubrir el déficit de presupuesto en cuanto a la infraestructura de los colegios.

En mayo último, la Contraloría General emitió 47 informes de control que evalúan el estado de las obras en colegios. Uno de estos informes se refiere a la institución José Olaya Balandra, donde se está ejecutando un proyecto de mejoramiento. Sin embargo, debido a las condiciones lamentables de su infraestructura, se determinó que era necesario demoler y reconstruir completamente el centro. Esta medida ha afectado a 1.700 estudiantes, quienes tienen que tomar sus clases en aulas prefabricadas como plan de contingencia.

Otro caso es el del colegio emblemático Rosa Carrera de Martos, que este año cumple 134 años de fundación. A mediados de marzo de este año, fue declarado inhabitable por Defensa Civil. Presenta un grave deterioro en la infraestructura, las columnas y las paredes están agrietadas y llenas de moho. Su directora, Mónica Franco Sánchez, tuvo que pedir un traslado temporal a diferentes instituciones en la ciudad. Por ello sus 1120 estudiantes se encuentran distribuidos en dos espacios: el nivel primario recibe clases en el colegio Ignacio Merino y el secundario en Nuestra Señora de Fátima.

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El estado del centro educativo demanda una pronta intervención; sin embargo, aún no hay planes de reconstrucción.

El proyecto recién está en su primera fase. La directora realizó su ficha EDAN para notificar el estado del plantel; luego la UGEL Piura envió esta ficha al Gobierno regional y la unidad formuladora aprobó el perfil de la obra bajo la recepción del gerente general, Jorge Cabellos. Cuando se termine la evaluación del perfil, será inscrita en el Ministerio de Economía para armar el expediente técnico y comenzar la licitación de la obra y su posterior ejecución.

Según la directora del colegio, la rapidez con la que avance el proyecto depende de las autoridades. Además, pide la pronta unificación de la institución en un solo espacio. Por ahora, han pactado con la directora de la UGEL para que sea Avifap, donde se encuentran los alumnos del colegio Víctor Rosales Ortega.

(Este trabajo fue realizado por estudiantes de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Piura. Colaboraron María Cerda, María Farías, Lía Reyes, Juan Peralta y Nicole Santimperi, en la investigación. Fotografía: Diego Luyo).