En su quinto día como jefe de Estado, el presidente de la república  visitó a la población damnificada asentada a un costado de la carretera Panamericana, y reconoció que la reconstrucción no ha avanzado nada. Por eso, dijo que será una de las prioridades de su gobierno.

Se propuso como objetivos trabajar en estrecha coordinación con los representantes de los tres niveles de gobierno, es decir, entre el Ejecutivo, los gobiernos regionales y los municipios, y con los técnicos y especialistas, para que los proyectos se elaboren atendiendo la realidad de la población, y que se ejecuten en el menor tiempo posible.

BLOQUEO. La expectativa por la sorpresiva llegada del presidente Martín Vizcarra al kilómetro 980, donde se encuentra la mayoría de pobladores damnificados, motivó que las familias asentadas en el centro poblado San Pablo, ubicado a la altura del peaje Bayóvar, bloquearan la Panamericana, con el objetivo que el mandatario haga un alto y verifique las condiciones en las que viven.

No obstante, el presidente ya había abordado un helicóptero en el Grupo Aéreo 7, en el cual se trasladó al asentamiento Nuevo Santa Rosa, donde la población lo esperaba cerca de un estrado levantado en la institución educativa de la zona.

OBJETIVOS. Martín Vizcarra, quien es miembro del Ejecutivo desde que asumió el mando Pedro Pablo Kuczynski, hizo un mea culpa y dijo que “si seguimos a este ritmo ¿cuándo vamos a terminar? Si hasta ahora no se ha hecho prácticamente casi nada”.

Agregó que el monto que se ha asignado para la reconstrucción para las 13 regiones afectadas, es de aproximadamente unos 25,000 millones de soles. De eso, el primer año solo se ha gastado 2,500 millones de soles, “es decir el 10%; si seguimos este ritmo, vamos a terminar la reconstrucción en diez años”.

Rápidas pero bien hechas. Para revertir esta situación, el presidente dijo que se deben tomar algunas medidas, comenzando por identificar los problemas, para luego buscarle una solución integral en el menor tiempo posible.

“Debemos hacer ajustes a las normas, no puede ser que un proceso de licitación demore entre seis a nueve meses, tiene que haber una modificación legal, no lo voy a hacer si no tengo el apoyo del Congreso, y ahí necesito el ojo vigilante de ustedes, porque por hacer las cosas rápidas, a veces se aprovechan y se sobrevaloran los costos y con mucho presupuesto. Hay que hacer las cosas rápidas pero bien”, enfatizó Vizcarra Cornejo.

AJUSTES. En otro momento, Vizcarra, quien asumió el mando el último viernes en reemplazo del renunciante Pedro Pablo Kuczynski, dijo que hay muchos problemas cuando se elaboran los expedientes.

“Muchas veces se hacen expedientes técnicos que no se ajustan a la realidad, y después que se tiene el proyecto, el proceso de licitación para adjudicarlo es muy largo, por eso se deben ajustar los tiempos, y para eso es necesario hacer una modificación a la norma, porque si seguimos así nos demoraremos 100 años”, reiteró Vizcarra.

Agregó que están afinando los detalles para proponer cambios en la Ley. “En esta semana tengo que definir los ministros, pero vamos a hacer los ajustes necesarios, no vamos a empezar de nuevo, imagínese todo el tiempo que nos tomaría”.

puentes. Respecto a su intención de trabajar más de cerca con el Poder Legislativo, indicó que los puentes para ello se tendieron desde que asumó el cargo, “en un día he tendido puentes para todos, y parece que han acogido esta propuesta, así que aprovechemos y no hagamos nosotros mismos acciones que lleven otra vez a romper los puentes. Vamos a conversar con todos”, acotó Vizcarra.

Respecto a si consideraría en el gabinete ministerial a un piurano, dijo que no puede adelantar nada, “pero será con gente que quiera el desarrollo integral del Perú, ese es el requisito, independientemente de donde se encuentre”.

Cabe señalar que el presidente Martín Vizcarra llegó a Nuevo Santa Rosa a las 8:30 de la mañana. Allí tuvo un breve acercamiento con la población que llegó de los asentamientos cercanos para exponerle sus necesidades.

Luego se dirigió al caserío San Pablo, ubicado en el kilómetro 985 de la Panamericana, donde los pobladores lo hicieron caminar por el arenal en donde se han asentado, y al igual que en Santa Rosa, prometió acelerar la reconstrucción, pero a la vez solicitó el apoyo de las autoridades y de la sociedad civil. Posteriormente, se marchó de Piura.

NO TOMAN MEDIDAS. Durante este primer año del desborde del río Piura, los damnificados vivieron los ataques. Se asesinó a Luis Alberto Pasache Zapata, trabajador de la empresa Santa Regina. Esta muerte ocurrió en el marco de las constantes incursiones violentas de un grupo de azuzadores a la propiedad de la mencionada empresa.

A pesar que dichos actos fueron denunciados oportunamente ante el Ministerio Público, hasta el momento no se ha tomado ninguna medida contra los agresores, pese a estar plenamente identificados en las denuncias.

ROBO. Otra investigación que tiene pendiente el Ministerio Público es el de la carpeta fiscal N° 357-2018 sobre el incidente del 26 de enero del presente año en la zona El Vegón, en el terreno de la empresa Santa Regina.

Allí un grupo de comunicadores denunció el robo a mano armada de instrumentos de trabajo y un comunero resultó herido. En dicha investigación, Santa Regina acreditó que los agresores no fueron parte de su personal de seguridad, pues ellos están debidamente uniformados y no usan armamento.

En el predio de esta empresa se han realizado constantes actos de usurpación, robo, daños, lesiones e incluso homicidio, realizados por este grupo de azuzadores. Sin embargo, las autoridades no sancionan a los responsables.

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