:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elcomercio/5VZSTIQPZBF5HNCO6TSSUQS77I.jpg)
En el marco del Plan de Operaciones “Fortaleza 2020”, la Policía Nacional decomisó 110 kilogramos de hoja de coca que provenía de la provincia de Carabaya, distrito de San Gabán, en la selva de Puno.
Los efectivos intervinientes pertenecen a la comisaría del distrito de Asillo (Azángaro), quienes paralizaron vehículos en el kilómetro 92 de la carretera Interoceánica Sur, a la altura del centro poblado de Jila Central.
En medio del operativo se intervino a un camión que transportaba nueve paquetes de plástico de color azul. El contenido era hoja de coca, que carecía de documentación.
La carga fue trasladada hasta los almacenes de la Empresa Nacional de la Coca (ENACO), ubicados en la ciudad de Juliaca.
La carga de hoja de coca sería para venderlo en las ferias de la Ciudad de los Vientos, principalmente para el consumo tradicional de la hoja.
Consumo de coca
En un último estudio denominado “Informe sobre la demanda de hoja de coca para fines tradicionales e industriales”, elaborado por la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida) y el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), con el apoyo de la Unión Europea en el Perú, da cuenta que al 2019 cerca de 6 millones de peruanos consumen 11, 712 toneladas hoja de coca.
Ello representa un incremento del 30% respecto a 2003, donde 4.6 millones de peruanos consumían alrededor de 8.7 toneladas de hoja de coca. Sobre el tema, el sociólogo Jaime Antezana, consideró que ENACO no tiene la capacidad de comprar toda esa cantidad, por lo que los informales seguirán trayendo hoja de coca de los valles de la selva.
