Las familias afectadas necesitan pronta asistencia. Puno. Foto/Difusión.
Las familias afectadas necesitan pronta asistencia. Puno. Foto/Difusión.

A pesar de pérdida de vidas humanas, la población puneña aun no aprende de la tragedia y sigua provocando incendios forestales. El más reciente se produjo en el distrito de Orurillo, en la provincia de Melgar, donde 14 viviendas quedaron en cenizas, varias personas resultaron heridas, además causar otros cuantiosos daños para el sector agropecuario.

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El siniestro inició el aproximadamente a las 2:00 de la tarde de este 3 de diciembre en el sector Vilaqarqa. El pasto seco y los fuertes vientos favorecieron a que las enormes lenguas de fuego se expandiesen rápidamente a las localidades de Pucarani, Central Huaraconi y Huanacuyo.

Los lugareños apoyados por funcionarios municipales y miembros de la compañía de bomberos, serenazgo y la Policía se valían de todos los medios para controlar el incendio. En el afán de poner a buen recaudo sus bienes, cinco personas resultaron con quemaduras de primer y segundo grado, quienes son atendidas por el personal de salud.

Daños

De acuerdo a las evaluaciones preliminares de la plataforma de Defensa Civil de esta localidad, el fuego arrasó más de 1200 hectáreas de pastizales, 10 árboles se quemaron, la red de conducción de energía eléctrica fue dañada y varios animales silvestres no lograron salvarse. La vivienda más afectada es la de Inés Tuni y Bonifacio Cruz.

Los lugareños indicaron que un menor de edad habría provocado esta tragedia, aunque las autoridades todavía investigan el caso para establecer responsabilidades. Mientras tanto, las familias afectadas piden la pronta asistencia para paliar las pérdidas que sufrieron.

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Antecedentes

A inicios de octubre, los poblados Totorani Chico, Quisuni Chico, Payuyo y Huanacuyo fueron afectados por un incendio forestal, pero aún esperan la ayuda de las autoridades.