Revelan historia del calvario de niña que fue violada a los 10 años

El día martes 14 en la provincia de Sandia, comunidad de Alto Queneque fue capturado Elmer Severiano Lanza Rodríguez, maestro de profesión buscado por la justicia para que responda por el delito de violación sexual de una niña de 10 años de edad. 

Al enterarse de esta intervención la madre de la víctima quien ahora es una adolescente de 16 años, Mery Mendoza, detalló el caso, reveló los detalles y dejó en claro que la justicia para el culpable tuvo un largo camino que jamás devolverá la alegría a su hija. 

De acuerdo al testimonio de Mery Mendoza, la violación se dio en las aulas del centro educativo de Isañura. Era el año 2011 y su hija de iniciales L.M.F. vivía con su abuela mientras que ella la visitaba dos o tres veces al mes mientras trabajaba lejos, en tanto, del padre no se sabía mucho.

En una de esas visitas la madre la notó extraña. De haber sido inquieta y alegre, se puso retraída y callada. En una ocasión pudo preguntar por su hija a una de sus compañeras que entre varias cosas le dijo “ Ella se encierra con el profesor”.Esto alarmó a la madre quien interrogó a su hija, hasta que ella le confirmó su peor temor, su profesor la había violado en varias ocasiones. 

El sujeto aprovechó una simple estrategia: había hecho que la pequeña se quede sola diciéndole “ a ti te falta DNI tenemos que hablar sobre eso”. Luego de ello, encontró varias formas que encerrarla en el aula. 

La madre preguntó sobre el asunto a la abuela quien le contó que la pequeña había sufrido sangrados, pero pensó que se trataba de caídas. En setiembre del año 2011, la mujer denunció este hecho a la fiscalía. 

Se tomaron los exámenes médico y se halló que efectivamente la niña había sido deflorada. El caso fue a dar a manos del fiscal Jorge Bedregal, el mismo que fue encarcelado tras haber sido sorprendido con el dinero de una “coima” en la mano el año 2015. Por eso, a la madre no le extraña que el proceso haya ido mal pues según expresó: “ el fiscal me jugo bonito” y el culpable no fue a la cárcel.

En la primera audiencia, 4 personas que Mery Mendonza identificó como parientes (el hermano y la mujer), del violador la atacaron y lograron que esta cita se suspenda por su inasistencia. 

Según indica Mery, Elmer Severiano Lanza Rodríguez, no solo era profesor sino también dirigente y hombre influyente en el centro poblado. Sostiene que una vez iniciado el proceso penal logró que la amiga de su hija no brinde su testimonio. 

Ella advirtió que varios de sus amigos indicaron que no sería su única víctima sino que había abusado y luego comprado el silencio de varias estudiantes. “ Solo yo me atreví”, indicó. Ahora que supo de su detención, pidió justicia para su hija aunque reconoce: “jamás estará igual. Ella era bien alegre, bien despierta; ahora se ha vuelto nerviosa. La marcó para toda su vida”.