Falsos promotores alquilaban aulas del tecnológico Mariátegui y otros inmuebles para operar. (Foto: Difusión)
Falsos promotores alquilaban aulas del tecnológico Mariátegui y otros inmuebles para operar. (Foto: Difusión)

La Fiscalía Corporativa de Mariscal Nieto logró la sentencia de cuatro años y ocho meses de cárcel con carácter efectiva para Teodoro Manuel Zúñiga Susanibar y Nazario Basilio Revilla Flores, por ser autores del delito contra el patrimonio en la modalidad de estafa agravada.

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Ambas personas aparentaron ser una asociación civil promotora de la Universidad Privada de Tacna (UPT) con sede en Moquegua. Pese a no tener vínculo con la casa de estudios y tampoco autorización de la Superintendencia Nacional de Educación Superior (Sunedu) convocaron a centenares de jóvenes para que participen en exámenes de admisión.

Ofertaban carreras profesionales

El hecho ocurrió en el año 2015, cuando hicieron la apertura de un local en la avenida Manuel Camilo de la Torre, en donde utilizando publicidad ofertaban carreras profesionales de la casa de estudios superior y hacían el llamado a los jóvenes interesados para inscribirse con el pago de 100 soles.

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En el primer proceso de admisión simulado ofertaron vacantes en diferentes carreras profesionales a 196 postulantes y en un segundo “examen extraordinario” lograron captar a otros 76 postulantes. De ambos grupos, hicieron creer que 263 jóvenes ingresaron a la UPT, cobrando montos adelantados por concepto de matricula y pensión.

Perjuicio económico a jóvenes

Los falsos promotores perjudicaron económicamente a los jóvenes postulantes quienes tenían la esperanza de iniciar sus estudios universitarios. Por estos hechos la Fiscalía solicitó pena efectiva para los imputados que estafaron a cerca de 300 jóvenes.

Asimismo en la investigación se recogió el testimonio de los agraviados que confirmaron durante la audiencia que los responsables señalaron tener la acreditación y autorización para operar como filial. Incluso muchos refieren haber pagado mensualidades y asistido a clases hasta que se dieron cuenta del engaño.