Pese a ser cerrado una semana para hacer trabajos de desinfección y ordenar el comercio dentro del mercado mayorista Miguel Grau éste sábado se permitió el ingreso de ambulantes lo que pone en riesgo la salud de los comerciantes y compradores.
Incluso en los exteriores del emporio se pudo apreciar vendedores que expendían sus artículos sin ser retirados de la zona pese a estar prohibido el comercio ambulatorio.
Correo intentó dialogar con la administradora del centro de abastos, María Pari, pero estaría con licencia por salud.