Incautan más de 3 toneladas de droga en lo que va del año
Incautan más de 3 toneladas de droga en lo que va del año

La frontera de  con Ecuador se ha convertido, en los últimos años, en una enorme puerta abierta para los traficantes de drogas en el norte.

La poca presencia policial en la línea fronteriza y la existencia de caminos que casi nadie controla, favorece a los “burries” quienes buscan pasar el estupefaciente por territorio peruano hasta el país sureño de Chile.

Pese a las carencias de logística y personal, la Policía y la Fiscalía en distintos operativos en lo que va del 2018 en Tumbes, han incautado 3,129 kilos con 615 gramos de droga, cuya cifra supera al total de todo el año 2017, que tuvo 1,778 kilos con 696 gramos.

DETENIDOS

A consecuencia de diferentes intervenciones desde enero hasta el 26 de diciembre del 2018, los efectivos policiales han capturado a 98 personas, por el delito de tráfico ilícito de drogas en la región Tumbes. Veinte de ellas, luego fueron dejados en libertad.

Un total de 37 colombianos fueron detenidos, es decir 19 varones y dieciocho damas. Asimismo 51 peruanos (35 de la rama masculina y dieciséis de la rama femenina) y diez ecuatorianos (tres mujeres y siete hombres).

De acuerdo al cuadro estadístico de la Unidad Antidrogas (Uniandro) de la PNP, desde enero hasta el 26 de diciembre de este año, se han decomisado 3,073 kilos 166 de marihuana tipo “cripy”, procedente del país de Colombia en diversas modalidades.

También se incautó un total de 56 kilos con 040 gramos de pasta básica de cocaína, y 405 gramos de clorhidrato de cocaína.

RUTAS

Según fuentes policiales, en la región Tumbes existe tres rutas frecuentadas por las organizaciones criminales dedicadas al tráfico ilícito de drogas. Ellas utilizan esta zona de frontera con Ecuador como puente para llevar la marihuana a Chile, donde en el mercado negro consiguen jugosas ganancias por la comercialización de la misma.

Un camino común pero riesgoso para los “burriers”, empieza en el Centro Binacional de Atención en Frontera (Cebaf) del distrito de Aguas Verdes, luego vía la Panamericana Norte siguen hasta cruzar el puesto aduanero de Carpitas de Canoas de Punta Sal.

En esta zona los ‘burries’, en su mayoría de nacionalidad colombiana, buscan el traspase de la droga, a bordo de los ómnibus de transporte público o vehículos particulares; pese a que en esta ruta los operativos policiales son constantes y varios de ellos han sido intervenidos.

POCO CONTROL

Existe otra ruta, cuyo gran sector es vía carrozable, la misma que es aprovechada por los narcotraficantes en vista que existe muy poco control de la Policía Nacional, que no dispone de un buen número de agentes en la unidad especializada y la falta de logística en general para realizar una exhaustiva labor.

Este recorrido lo inician en la zona fronteriza de Quebrada Seca en el distrito de Matapalo, que sigue por Cerro Blanco de San Juan de la Virgen, luego Pampas de Hospital cruzan el puente Francos y enlazan a San Marcos, Cañaveral (Casitas) hasta Quebrada Fernández (Canoas de Punta Sal) con límite a Máncora (Piura).

Otra de las rutas que emplean los “mochileros”, es por el Puente Internacional, que une Ecuador y Perú, sigue su trayecto por la carretera Panamericana Norte para burlar el control aduanero de Carpitas, se desvían por la zona de playa para subir después a Máncora y continuar su camino al sur del país.

Las modalidades que han empleado las organizaciones criminales para traspasar la ilegal sustancia son las de camuflar la droga en paquetes tipo ladrillo o láminas en las estructuras de automóviles, es decir, escondidas en las puertas, asientos, maletera, techo y demás compartimientos de los vehículos, inclusive en los tanques de combustible.

Asimismo, se hallaron bloques de estupefacientes en el interior de embutidos, pescado y carne, y acondicionadas en las estructuras de cooler de plástico y tecnopor y otras modalidades.

INCAUTACIONES

El otro caso, se produjo el 26 de enero de este año, en el puesto de Carpitas donde los policías capturaron a Lucio Escallón Camacho (20) y Asnoraldo Viáfara Cundumi (55), quienes transportaban pescado en dos cooler de tecnopor, en cuyas estructuras habían acondicionado bloques de droga.

ENCOMIENDA

El pasado lunes 22 de octubre de este año en el distrito de Aguas Verdes, se decomisó 679 kilos de marihuana “cripy” camuflada dentro de 74 muebles y enseres contraplacados, que iban a ser despachados desde una agencia de transportes de Aguas Verdes, en la región Tumbes, cuyo destino final era el país de Chile.

Los agentes especializados del Área Antidrogas, se dirigieron al almacén de la empresa Cruz del Sur, ubicado en el jirón Amazonas 219, para realizar la verificación de un cargamento de mudanza llevada a cabo de Ecuador hacía Aguas Verdes.

Según el reporte policial, la encomienda era financiada por el colombiano José Álvaro Cruz, de 60 años de edad y con residencia ecuatoriana, y en presunta complicidad con José Edilberto Jiménez Peña (45) y César Augusto Montalván Cruz (25), quienes se encargaban del transporte y envío de los objetos.

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