Piden más inversión en salud mental

Los altos índices de violencia familiar y la migración han sacado a relucir las principales deficiencias para enfrentar los problemas mentales, razón por la cual el Ministerio de Salud (Minsa) recomienda a las autoridades locales invertir al menos el 10% de su presupuesto destinado para el sector, en mejorar las condiciones del tratamiento de la salud mental, según el especialista Yuri Cutipé Cárdenas.

DIAGNÓSTICO 

“La migración solo nos está mostrando la principal debilidad de falta de profesionales y de acceso a la población en general, en Tumbes no hay un psiquiatra y así hubiera uno es insuficiente, al igual que los profesionales en psicología”, precisó.

Yuri Cutipé informó que es esta región al menos unas 50 mil personas padecen de algún trastorno mental, y la mayor parte lo tiene por problemas de alcoholismo, depresión y de transtornos de ansiedad. Y que hay un grupo reducido de pacientes con psicosis o esquizofrenia, quienes por falta de tratamiento deambulan por las calles.

Dijo que en el plazo más corto debe entrar en funcionamiento el centro comunitario de Salud Mental de Campo Amor en Zarumilla, el cual será un centro piloto y cuenta con equipamiento y personal.

“Aún no está en funcionamiento pero pronto debe hacerlo, ya están trabajando con la comunidad, hay afluencia de público principalmente niños, porque se debe trabajar mucho de manera preventiva y depende de la dirección regional de Salud y el Gobierno Central de articular más esfuerzos para crear otros centros similares en Tumbes”, detalló Cutipé Cárdenas.

INVERSIÓN 

“Nosotros tenemos un plan al 2021 en miras al Bicentenario y deberíamos tener a nivel nacional 281 centros de salud mental y acá en Tumbes, debido a que su población llega a casi los 300 mil habitantes, deberíamos instalar tres centros de atención comunitaria y además de implementar una sala de hospitalización psiquiátrica en el nosocomio regional”, agregó.

PROPUESTA

Resaltó que esta atención no solo es para migrantes, sino para la población en general, pero en el caso de los extranjeros es más evidente por el vía crucis que están atravesando socialmente, dijo que la evaluación mental en ellos “debe ser obligatoria”.

“En los casos de violencia, la atención la requiere la víctima más no el agresor, porque el 90% de agresores actúan por machismo o racismo y en ellos no influyen las terapias, en cambio la víctima es a quién se le debe auxiliar psicológicamente para evitar que reincida con su agresor o en el peor de los casos genere reacciones que atenten contra su integridad o miembros de su familia”, aclaró el especialista.

Otro reto al 2021, es que todos los centros de salud de Tumbes cuenten con profesionales especializados en el tema.