Ricardo Morán puede dividir su vida en dos. Desde la llegada de Emiliano y Catalina, el productor de televisión ha notado que su vida cambió para siempre y lo evidenció en una entrevista para Mujeres al Mando al quebrarse cuando hablaba de ellos.
El jurado del programa de imitación Yo Soy dio detalles de lo que fue su visita al Cusco hace algunas semanas, en plena crisis política y sanitaria.
“Lo que pasó en mi viaje a Cusco no la pasé muy bien yo, porque llegué al Cusco y al toque hubo golpe de Estado y al toque tuve que salir a machar. Yo no disfruté tanto de la naturaleza de Urubamba y todo eso”, sostuvo.
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Cuando fue consultado sobre sus hijos, Morán no reparó en palabras para intentar describir lo que siente por ellos y las vivencias que han tenido en conjunto en tan corto tiempo.
“Aprendes lo que todos los papás dicen y lo que mi papá y mi mamá me decían, llega un momento en que empiezas a vivir tu vida para ellos y para el disfrute de ellos y para el crecimiento de ellos. Eso te hace a ti un poquito mejor persona”, dijo.
“De sus cortos año y medio, esas tres semanas han sido los 21 días más felices de mi vida sin comparación. No ha habido ningún momento que esos 21 días metidos en el barro”, añadió.
De inmediato, el productor no pudo contener las lágrimas cuando se atrevió a predecir lo que será su futuro y el de Emiliano y Catalina.
“Luego yo me voy a sentar y ver las fotos o luego yo voy a (se quiebra) poner a conversar y me voy a acordar de lo felices que fueron. Entonces ya para qué más”, acotó.
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