La pérdida de firmeza en los brazos es común a partir de los 40, pero puede combatirse eficazmente con ejercicios específicos de fuerza y resistencia. Conoce la rutina ideal para lograrlo.
La pérdida de firmeza en los brazos es común a partir de los 40, pero puede combatirse eficazmente con ejercicios específicos de fuerza y resistencia. Conoce la rutina ideal para lograrlo.

A partir de los 40 años, muchas personas notan cambios en su cuerpo: el metabolismo se vuelve más lento, disminuye la masa muscular y aparece la flacidez, sobre todo en los brazos. Esta pérdida de firmeza, conocida comúnmente como “alas de murciélago”, genera incomodidad, especialmente al usar ropa sin mangas. Aunque muchos optan por la cirugía estética, el ejercicio físico es una alternativa eficaz y accesible para combatir este problema.

Según Cleveland Clinic, la flacidez en los brazos se debe principalmente a la pérdida de elasticidad de la piel, un proceso natural del envejecimiento, y en algunos casos, a la pérdida significativa de peso, ya sea con o sin cirugía, donde la piel no logra adaptarse al nuevo volumen corporal.

Sergio Pérez, jefe del departamento técnico de Smart Fit, señala que “el entrenamiento de fuerza es fundamental para mantener la funcionalidad y prevenir la pérdida progresiva de masa muscular conforme pasan los años”. Agrega que incorporar ejercicios específicos para brazos ayuda a mejorar visiblemente el tono muscular y reducir la flacidez con constancia.

Rutina recomendada para tonificar brazos después de los 40:

Puedes realizar estos ejercicios en el gimnasio o en casa, usando mancuernas, botellas con agua o el peso de tu cuerpo:

  1. Curl de bíceps: Fortalece la parte frontal del brazo.
  2. Curl martillo: Trabaja bíceps y antebrazo, útil para fuerza funcional.
  3. Copa (press francés): Activa el tríceps en su porción más larga.
  4. Extensión de tríceps con cuerda (en máquina): Ejercicio integral para todo el tríceps.
  5. Fondos (dips): Fortalece tríceps y hombros usando una silla o banco.

Recomendaciones útiles:

  • Entrena al menos 3 veces por semana.
  • Realiza 3 series de 12 a 15 repeticiones por ejercicio.
  • Aumenta el peso progresivamente, sin sacrificar la técnica.
  • Calienta antes y estira al final para evitar lesiones.
  • Acompaña el entrenamiento con una dieta rica en proteínas y una buena hidratación.

Con disciplina y un enfoque integral, sí es posible transformar tus brazos después de los 40 y recuperar la confianza sin necesidad de pasar por el quirófano.