Un experimento realizado en Francia para una revista de investigación sobre hostelería y turismo concluyó que las meseras que se visten de rojo obtienen hasta un 26% más de propinas que si se vistieran con otros colores.
El estudio, publicado en la revista Jornal of Hospitality & Tourism Research, evaluó el comportamiento de 722 clientes en cinco restaurantes de dos ciudades diferentes.
Los investigadores pidieron a las camareras de esos restaurantes que cada día se vistieran con un polo de diferente color y atendieran a sus clientes como de costumbre, sin aplicarse maquillaje ni usar joyas. Las camareras no tenían conocimiento del objetivo del experimento.
Inconscientemente los comensales varones le dieron entre el 15% y el 26% más de propina a las camareras que vestían de rojo que a las que vestían otros colores.
Sin embargo, las clientes mujeres no hicieron distinciones y les dieron propinas similares a todas, sin importar el color de su vestimenta.
Los autores del artículo señalan que por la connotación sexual de este color y el impacto del mismo en los hombres, las mujeres vestidas de rojo se vuelven más deseables y generan actitudes más positivas hacia ellas, efecto que no influye en el comportamiento de las mujeres, sin embargo.
Los investigadores escribieron: "Como el color rojo no tiene ningún efecto negativo en las clientes mujeres, a las camareras podría serles útiles llevar ropa de color rojo en el trabajo".