Julio César Arroyo: "El calor del hogar es el mejor regalo que he recibido"
Julio César Arroyo: "El calor del hogar es el mejor regalo que he recibido"

“Un regalo, una sonrisa” es el lema que impulsa a Julio César Arroyo, el Papá Noel peruano, a caminar por zonas de pobreza extrema llevando juguetes a los niños más necesitados. Aunque no cuenta con el financiamiento económico necesario, él no se rinde y ha regresado, después de un breve receso, para seguir regalando momentos inolvidables a los más pequeños.

¿Qué te motivó a usar el disfraz de Papá Noel? 

Todo surge por un película que vio mi hijo. En ella, el papá se transforma en Papá Noel. Entonces, cuando mi hijo terminó de verla, me preguntó si todos los papás son Papá Noel. Yo le dije que sí, que todos lo éramos. A lo que él me dice “yo nunca te he visto vestido de Papá Noel”. Y yo le respondo “lo que pasa es que yo lo hago a escondidas”. Desde entonces decidí hacerlo de verdad. Junté dinero, compré juguetes, después de la medianoche de Navidad me disfracé y regalé juguetes a los niños de mi barrio para que mi hijo viera que Papá Noel sí existía.

¿Y cuándo decidiste ir a los lugares más pobres?

La primera vez que me disfracé de Papá Noel, yo había comprado pelotitas y cuando empecé a repartir, uno de los niños me dijo “¿qué, esto nomás?, mi papá me ha dado otro juguete mejor”. Entonces abrí los ojos y dije “¿qué hago regalando a niños que sí tienen?, es mejor llevarle a gente que necesita, que nunca ha recibido un regalo”. Al año siguiente empecé a enviar correos a todos mis amigos y conocidos, les conté la historia completa y los animé a que cada uno done un regalo y les llevemos a los niños que más necesitan. Muchos me dijeron “Julio, cuenta conmigo”, y ahí comenzó todo. Fui a recoger los obsequios.

¿Viviste alguna experiencia conmovedora mientras entregabas los obsequios?

Conocí a un niño cuadrapléjico que estaba sentado en un silla provisional y cada vez que me veía disfrazado se emocionaba, movía los bracitos y me abrazaba. Siempre le llevaba un regalo y un día le pregunté a su mamá si tenía una silla de ruedas, ella respondió que no porque era cara. Justo por esos días me hicieron una entrevista en un revista y conté su historia. Al día siguiente comenzaron a llamarme al teléfono y ese año recibí 7 sillas de ruedas. Le di una al niño y las otras las regalé a otros pequeños en situaciones similares.

La actividad que realizas parece muy ardua, ¿cómo te organizas? 

Todo comienza un mes y medio antes de llegar a diciembre porque tengo que recoger los regalos, recibir depósitos y comprar los juguetes. A veces, mi hijo y mi madre me apoyan recogiendo el juguete o haciendo otras actividades relacionadas. Uno solo no puede hacerlo todo.

¿Qué es lo que te motiva a seguir? 

La mayor motivación siempre es ver a los niños sonreír. Aunque había años que quería estar con mi familia, me sentía mal y pensaba “si yo dejo de hacerlo, más de mil niños se quedarán sin juguetes”.

Dejaste de hacer tu recorrido por cerca de 3 años... 

Sí, el último que hice fue en el 2015. De ahí lo dejé porque cambiaron de gobierno y yo me quedé sin trabajo. Conseguí algo por ahí, pero no era lo mismo. Inclusive, este año ya no iba a hacerlo, pero recibí el apoyo suficiente para lograrlo.

¿Qué te dicen cuando llegas a los barrios con los obsequios para los niños?

Pensaban que era un político. “Señor, ¿de qué partido es?”, me preguntaban los padres. En los asentamientos humanos la cantidad no pasaba de mil niños; entonces, que alguien llegue a dar juguetes sin una doble intención les sorprende.

¿Cuál es la reacción de los niños cuando te ven?

Es como si llegara Superman. Llego, me abrazan y me dicen “yo me he portado bien este año”. Me tratan como si realmente fuera Papá Noel. Se ven muy felices y emocionados.

¿Cómo pasabas la Navidad cuando eras niño?

Todos los años para mí era mi mejor Navidad. Siempre recuerdo la cena con la familia, no recuerdo tanto los juguetes. El calor del hogar es el mejor regalo que he recibido.

Si alguien quiere apoyar realizando un donativo, ¿cómo pueden contactarte?

Pueden hacerlo llamando al 980 971 769 o escribiéndome al Facebook, estoy ahí como Julio César Arroyo Ruiz.

Sobre Julio César Arroyo

Papá Noel peruano. Estudió Diseño Gráfico en el Instituto Nacional María Rosario Aráoz Pinto y es gerente general de la orquesta digital 'Son del Arroyo'.

Datos

- En 2005, empezó a llevar obsequios a niños de escasos recursos.

- 1000 regalos son entregados cada año durante su recorrido.