Para muchos Leusemia es uno de los íconos del rock nacional. Sin embargo, a poco de cumplir tres décadas sobre los escenarios, no faltan quienes hablan del fin de la agrupación, del desgaste de un conjunto que abanderó la movida 'subte', inmortalizó temas como Al colegio no voy más y que evolucionó hacia el rock progresivo con discos como Yasijah y Hospicios, su producción más ambiciosa que -en su momento- tuvo el acompañamiento de la Orquesta Sinfónica Juvenil.

Treinta años no pasan en vano. Hoy 'el F' usa lentes para leer, Raúl Montañez, el otro miembro histórico de la banda, ya peina canas y sigue vistiendo de negro. Tienen 52 y 54 años, respectivamente, y aunque aseguran que siguen sintiendo lo mismo cuando se paran frente al público, resulta inevitable preguntar: ¿Qué piensan cuando algunos fanáticos afirman que Leusemia murió hace tiempo?

"Lo importante acá es que seguimos tocando y seguimos divirtiéndonos duro con la música y con la gente. Nos escriben mucho y compartimos muchas cosas. El resto es anexo", responde Daniel F Valdivia Fernández.

"Cuando subimos al escenario vemos que quienes disfrutan son los más jóvenes. Aunque a veces salen algunos de nuestra promoción con los ojos medios rojos... pero de la emoción (risas). Es algo muy sui géneris. Por ejemplo, cuando tocamos Un lugar, que es del año 84, y vemos que hoy -como hace 30 años- la canción produce la misma emoción en chicos de 18, pienso que es una vivencia envidiable", interviene Raúl Montañez, 'Montaña', primera guitarra de la histórica banda.

ASESINANDO AL MITO. La página web 'Leusemia4U' ha contabilizado hasta nueve variantes en las formaciones de la banda fundada en agosto de 1983, cuando se estrenaron en La Caverna, un bar del jirón Moquegua en el centro histórico de Lima. Los hombres sobre el escenario aquella noche eran Daniel F en la voz, su hermano Kimba Vilis en la batería, y Leo Escoria, hijo del entonces director de la Orquesta Sinfónica de Lima, en el bajo. Actualmente 'el F' y 'Montaña' ensayan de a pocos, con algunos nuevos integrantes y también con los antiguos, que serán parte del concierto por el aniversario que se desarrollará el 2 de noviembre en el Centro Comercial Lima Plaza Norte de Independencia, en donde los acompañarán Libido, Inyectores, M.A.S.A.C.R.E., Terreviento, Trémolo, Psicosis, Campo de Almas, Serial Asesino, entre otros.

-¿Qué rescatar de todos estos años?

"El haber sobrevivido haciendo la bulla que hacemos y con el tipo de lenguaje que manejamos", afirma 'el F', y agrega: "También queda el seguir siendo alguien que, sin mucha imagen para la industria, pudo mantenerse pese a no estar en la radio o no tener videoclips. Ese tipo de cosas, me parece, es la cumbre para cualquier artista".

"En un medio tan hostil como es el rock -sostiene 'Montaña'-, tocar 30 años y mirar para atrás y ver que el saldo es positivo es una bendición. Seguir sintiendo lo mismo que cuando escuché por primera vez rock y sentirme reafirmado cada vez que subo al escenario, con esa misma rabia, pero con los cuerpos más arrugados, con canas y más experiencia es maravilloso".

-¿Se consideran una banda ícono?

"Yo no me considero ícono de nada. Si hubo bandas que se convirtieron en eso fue porque aparecieron en momentos cruciales, como Los Stones, Los Beatles o Pink Floyd. De repente, en el momento que aparecimos, todo era un desierto. No había mucho movimiento del rock como identidad. Todos querían cantar en inglés temas de otros y seguir siendo el mismo país que copia todo el tiempo a los demás. Entonces había dos o tres bandas por ahí que comenzaron a tocar sus propios temas y entre ellos estábamos nosotros. Por alguna razón el resto se quedó en el camino y nosotros continuamos. Lo otro es terquedad, mantenemos la misma rabia, el mismo sentimiento. El asunto con Leusemia es que es una adolescencia perpetua, creo que la gente siempre va a detectar eso", asegura Daniel F.

"A mí me encanta la etapa progresiva de la banda -continúa el intérprete de El asesino de la ilusión-. Pero lo que me ilusionó de adolescente es la música que hago ahora con todos esos ribetes setenteros".

Para Raúl Montañez, en cambio, los dos discos que grabó con Leusemia son parte de un hito, sabe que marcaron a una generación. "Yo grabé Leusemia (1985) y A la mierda lo demás (1995). Me quedo con los dos porque marcaron un tiempo, sembraron y fundaron una escena con músicos que cantaban canciones propias. Esos conciertos eran épicos, donde sentimos que se refundaba la escena del rock nacional. Ambas producciones son un golpe de rock and roll".

Mientras Leusemia se prepara para su concierto por los 30 años, sus históricos integrantes continúan con sus proyectos personales. Y, aunque no preparan un nuevo disco, sus fanáticos esperan una pronta producción. 'El F', en su faceta de escritor, prepara su quinto libro, 'Montaña' alista una producción en formato acústico. "El asunto es seguir produciendo", afirman en coro quienes son parte de la historia de la escena musical peruana, aquellos que con Leusemia inmortalizaron canciones como Oirán tu voz, oirán nuestra voz y que gritaron desde una vitrina más subterránea: No hay futuro, para hacer del 'pogo' y de la sinfonía un ícono musical. Fotos: Johanna Valcárcel

30 AÑOS SOBRE UN SUEÑO

La discografía de Leusemia incluye los títulos:

- Leusemia (1985, El Virrey).

- A la mierda lo demás (asesinando el mito) (1995, Huasipungo Records).

- Moxón-El Estokastiko viaje de Defekon I a través de los tiempos (1998, Huasipungo Records).

- Yasijah (1999, L-25 Producciones).

- Al final de la calle-Los sótanos de la angustia (2000, L-25 Producciones).

- Leusemia (Reedición, 2000, Iempsa).

- Hospicios: Los últimos ciudadanos de la séptima casa de la obscuridad (2004, L-25 Producciones).