Revelador, los gatos si entienden las leyes de Newton

Una nueva investigación japonesa publicada en la revista Animal Cognition ha revelado un lado hasta ahora desconocido del instinto felino.

Según teorizaban los investigadores, la habilidad que tienen los gatos domésticos para cazar se debe a que su audición altamente desarrollada les permite predecir dónde puede estar escondida su presa.

Para comprobar esta teoría, los investigadores desarrollaron un experimento con 30 gatos de los famosos "Cat Café" japoneses.

"Reclutamos a los gatos y a sus dueños (...) cada café tenía una habitación separada en donde pudimos realizar el experimento de forma individual con cada gato" indicaron los expertos en el estudio.

El experimento consistía en hacer que un contenedor cercano al gato se agitara, y en algunos casos paralelamente hacían que algo resonara en su interior, simulando una presa oculta. Los gatos se mostraban interesados en la caja cuando algo resonaba, esperando que algo cayera o saliera de éste, pero si se abría el contenedor y no había nada dentro, los animales se mostraban confundidos.

Los gatos además miraban por más tiempo a los contendores con condiciones incongruentes, como cuando un objeto caía de su interior luego de que el contenedor se agitara sin producir sonido, o al revés.

Luego de analizar cada uno de las grabaciones con los gatos, los investigadores determinaron que los gatos estaban más interesados en el contenedor cuando producía un sonido, y se quedaban mirando fijamente pues esperaban que algo saliera de allí. Luego continuaban mirando fijamente si el contenedor "no cumplía con las leyes de la física", al estar vacío pese a que un objeto resonara dentro.

"Los gatos usan una comprensión causal-lógica del ruido o sonido para predecir la aparición de objetos" señaló el autor Saho Takagi en un comunicado. "Este estudio puede servir de evidencia para demostrar que los gatos tiene un entendimiento rudimentario de la gravedad", concluyen.

Esta habilidad también los distingue de los simios, quienes en experimentos similares no tuvieron resultados tan exitosos. En su caso, los simios se basan más en su vista que en su audición al buscar pistas.

El equipo de investigadores espera que a futuro poder determinar cuán sensible es la audición de un gato a los sonidos de objetos ocultos, y si un gato podría determinar el tamaño o cuán abundante es el objeto basándose sólo en su sonido.