Personal de una funeraría de Quito, llega con un ataúd de madera, a una casa para levantar el cadáver de una anciana de 91 años que falleció por COVID-19, en un barrio periférico de Quito. (EFE/ José Jácome).
Personal de una funeraría de Quito, llega con un ataúd de madera, a una casa para levantar el cadáver de una anciana de 91 años que falleció por COVID-19, en un barrio periférico de Quito. (EFE/ José Jácome).

Quito. [EFE]. La cifra de decesos confirmados por ascendió este sábado a 2.688, mientras que la de muertes probables por esa enfermedad totaliza 1.632 en , donde los contagiados llegaron a 32.723, según los datos oficiales.

Hasta el momento se han tomado 93.344 muestras para coronavirus SARS-CoV-2 entre PCR y pruebas rápidas.

Un total de 14.126 de los casos confirmados (23.786 por PCR y 8.937 por pruebas rápidas) se encuentran estables en aislamiento domiciliario, 404 hospitalizados en situación estable y 195 con pronóstico reservado.

De acuerdo al boletín diario de estadísticas del Ministerio de Salud, 3.433 pacientes se han recuperado, 3.226 han recibido el alta hospitalaria y 8.651 el alta epidemiológica.

Con base en resultados de las pruebas PCR, la provincia del Guayas, la más castigada por el COVID-19 reporta 12.907 casos.

A Guayas le siguen las provincias de Pichincha, cuya capital es Quito, (2.520), Manabí (1.468), Los Ríos (1.179), El Oro (907), Azuay (671) y Santa Elena (644), Santo Domingo de los Táschilas (558), Esmeraldas (417) y Tungurahua (337).

El resto de provincias tienen menos de 300 casos cada una.

El 56 % de los contagiados son hombres y, por grupo etario, el 55,9 % está en el rango de 20 a 49 años, seguido por el de 50 a 64 años (24,8 %), y el de más de 65 (16,3 %).

Menores porcentajes se registran en personas por debajo de los 19 años, según las cifras oficiales.

Desde el pasado 16 de marzo, la población de Ecuador se encuentra en aislamiento domiciliario y masivo.

No obstante, las autoridades del Gobierno nacional han aplicado un sistema de "semaforización" para el levantamiento paulatino y coordinado de las restricciones a la movilidad humana, de vehículos y la vuelta progresiva a las actividades laborales.

Daule, en la provincia del Guayas, y Palora, en la de Morona Santiago, fueron los primeros cantones (localidades) en cambiar de “rojo” a “amarillo” en el sistema de semaforización epidemiológica.

El viernes, tres cantones adicionales pasaron a la condición de “amarillo”, entre ellos uno de los más contagiados del país, lo que les permitirá reducir el toque de queda en cuatro horas y reabrir algunas actividades comerciales.

La ministra de Gobierno, María Paula Romo, reveló que Samborondón, en la provincia de Guayas, y Paute y El Pan, en la de Azuay, ambas en el sur del país, pasan de