El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la imposición de aranceles adicionales de 25% a las importaciones provenientes de Japón y Corea del Sur, en una medida destinada a presionar a ambos países para alcanzar nuevos acuerdos comerciales antes del vencimiento de plazos establecidos.
En dos cartas casi idénticas enviadas a sus socios comerciales, Trump señaló que los aranceles entrarán en vigor el próximo 1 de agosto, argumentando que las relaciones comerciales con ambos países “se hallan desafortunadamente lejos de ser recíprocas”.
“Estamos abiertos a continuar negociando, pero necesitamos un comercio justo y equilibrado para los trabajadores y las empresas estadounidenses”, sostuvo el mandatario en el texto.
Los nuevos aranceles se suman a las recientes tensiones comerciales que han marcado las relaciones de EE. UU. con socios clave en Asia, en momentos en que Washington busca cerrar acuerdos que beneficien al sector industrial norteamericano y disminuyan el déficit comercial con ambos países.
Hasta el momento, ni el gobierno japonés ni el surcoreano han emitido una respuesta oficial a esta medida, aunque fuentes diplomáticas señalan que se preparan conversaciones de alto nivel para analizar las posibles salidas al conflicto comercial antes de la entrada en vigor de las tarifas.
Analistas advierten que estas acciones podrían generar repercusiones en los mercados internacionales, especialmente en sectores como automotriz, tecnología y manufactura, que mantienen amplios lazos de exportación hacia Estados Unidos.