En 1980, el físico Alan Guth desarrollo lo que sería la teoría de la inflación del Universo, una propuesta modificaba la teoría del Big Bang convencional. En ella, Guth señala que el Cosmos se infló con gran rapidez a partir de una pequeña porción del espacio y se volvió exponencialmente mayor en una fracción de segundo.
Años más tarde, este planteamiento inicial fue recogido por el también físico de origen ruso Andrei Linde, quien modificó el concepto, lo profundizó y lo llamó "la nueva inflación".
Por mucho tiempo este planteamiento tuvo detractores, pero también personas que lo apoyaron. Y tuvieron que pesar varios años para que finalmente hubiera una prueba real de que Linde estaba en lo cierto.
El Centro Harvard-Smithsonian para la Astrofísica logró captar una serie de ondas gravitacionales en forma de eco que sería la prueba irrefutable de que la teoría de Guth y Linde era cierta.
Andrei Linde recibió la noticia de este hallazgo en su hogar por parte de un colega, y no pudo ocultar su entusiasmo al saber que el trabajo de toda su vida tenía un importante sustento.
El descubrimiento ha sido calificado por los expertos como una de las revelaciones del año, y podrían llevar a Linde a ser nominado al premio Nobel.
Aquí el video de su reacción:
