Ashlee Thomas y Anastasia Vlasova son dos jóvenes que desarrollaron trastornos alimenticios. (Foto: Captura)
Ashlee Thomas y Anastasia Vlasova son dos jóvenes que desarrollaron trastornos alimenticios. (Foto: Captura)

La estadounidense Ashlee Thomas y la australiana Anastasia Vlasova son dos jóvenes que experimentaron trastornos de la alimentación luego de seguir vídeos de Instagram que mostraban un falso reflejo de cómo obtener el cuerpo soñado siguiendo una “alimentación limpia”.

La “alimentación limpia” se presenta como una dieta soñada que promete cuerpos esculturales, pero cuya aplicación puede derivar en trastornos alimenticios.

Según revela , Thomas, la primera víctima del espejismo mostrado por la red social lloraba de manera incontrolable cuando sus padres indicaban que era momento de desayunar, almorzar o cenar. Incluso llegaron a momentos tensos donde se debía emplear la fuerza para que logre ingerir sus alimentos.

“Llegó al punto en el que recuerdo estar sentada y mi padre sosteniendo mi mandíbula y mi madre inyectando comida en mi boca porque me negaba a comer”, dijo Ashlee, recordando las terribles escenas que protagonizaba cuando tenía 14 años.

“Cuando me ingresaron en el hospital, el doctor me dijo: ‘No entendemos por qué estás aquí. Deberías estar muerta’. En realidad, en el hospital, mi corazón falló dos veces”, añadió la joven, quien empezó su camino por la anorexia luego de observar videos sobre la “alimentación limpia”.

¿Qué es la alimentación limpia?

Consiste básicamente en consumir más alimentos naturales —como frutas, vegetales, proteínas magras, cereales integrales y grasas saludables— y en limitar los tentempiés muy procesados, los azúcares y otros alimentos envasados, explica la página de .

“Cuando vi a esas ‘influencers’ que tenían ‘likes’ y tenían todos esos seguidores, quise probar eso. Quise que me quisieran”, comentó Ashlee Thomas, agregan que se había convertida en una adicta del Instagram.

La australiana Anastasia Vlasova es otra sobreviviente del trastorno de la alimentación que culpa también a la red social de intentarle vender una falsa realidad en forma de cuerpos esculturales que “se lograron” a base de “alimentación limpia”.

“Me bombardearon con todo estos mensajes de que tienes que hacer ejercicios todos los días, o tienes que hacer este tipo de ejercicios o tienes que hacer este tipo de dieta”, expresó en diálogo con CNN.

Estos casos -y los miles que existen- avivan los testimonios de Frances Haugen, exempleada de Facebook, sobre los daños que generan las empresas de Mark Zuckerberg en los niños y adolescentes tras filtrar varios documentos internos.

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