Grecia nacionalizará su tercer mayor banco para evitar problemas de solvencia
Grecia nacionalizará su tercer mayor banco para evitar problemas de solvencia

Luego que el Eurobank de Grecia, el tercer mayor banco privado del país, reconociera que no podrá captar suficiente capital del mercado privado para mantenerse solvente, el Gobierno anunció que nacionalizará la entidad con el visto bueno de la junta de accionistas.

Hoy concluía el plazo dado por el Gobierno griego a los cuatro bancos considerados "sistémicos" -National Bank (NBG), Piraeus, Eurobank y Alphabank- para aprobar sus planes de ampliación de capital.

Pero mientras las juntas de accionistas de los otros tres ya habían ratificado en semanas pasadas los planes de recapitalización que cumplen con el mínimo de capital privado exigido para mantenerse fuera del control estatal, la dirección de Eurobank reconoció que será incapaz de captar en el mercado privado el capital necesario.

Por ello, se puso en manos del Fondo de Estabilidad Financiera del Estado Helénico (HFSF), que inyectará los 5.839 millones de euros necesarios para mantenerlo a flote.

Los problemas de adecuación a la ratio de solvencia comenzaron para las principales entidades griegas a principios de 2012, cuando la reestructuración de la deuda pactada entre Atenas y sus acreedores supuso la "quita" de unos 105.000 millones de euros.

El pasado diciembre, otros 20.000 millones de euros fueron "borrados" de las cuentas de deuda soberana a través del intercambio de bonos griegos por otros a un tercio de su valor.

Una parte importante de estos títulos estaba en manos de la banca privada de Grecia, que hubo de asumir fuertes pérdidas, a las que se unieron las causadas por la reducción de los depósitos y otras actividades económicas víctimas de los seis años de recesión que acumula el país mediterráneo.

Por ello, en el memorándum firmado por Grecia y la troika (Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional) en marzo de 2012 se incluía un programa de reestructuración y recapitalización de la banca para el que se reservaron 50.000 de los 130.000 millones de euros del segundo rescate.

De estos, unos 18.000 millones ya fueron entregados el pasado otoño, mientras que ahora se utilizarán otros 27.500 millones para inyectarlos en los cuatro grandes bancos.

En realidad, los fondos que otorgará el Estado a NBG, Piraeus y Alphabank, en un cómputo sobre el capital social total, haría de ellos también entidades públicas.

Pero el acuerdo alcanzado con la troika contempla que, si los bancos son capaces de lograr al menos el 10% de sus necesidades de capital en el mercado privado, el HFSF inyectará el resto de capital necesario recibiendo a cambio bonos convertibles contingentes (Cocos) u otro tipo de acciones con derechos restringidos de voto, lo que permitirá que la gestión siga siendo privada.

El Mercurio.