El jefe de Estado de Venezuela, Nicolás Maduro, habla durante una rueda de prensa desde el Palacio Miraflores este viernes, en Caracas. (EFE/Cristian Hernández).
El jefe de Estado de Venezuela, Nicolás Maduro, habla durante una rueda de prensa desde el Palacio Miraflores este viernes, en Caracas. (EFE/Cristian Hernández).

Caracas. [AFP]. Nicolás Maduro anunció este martes la creación de un “comando de operaciones secreto” que cumplirá labores de “inteligencia” y “contrainteligencia”, destinadas a neutralizar supuestas “acciones encubiertas” planeadas por Estados Unidos para generar desestabilización en el país caribeño.

Al revelar la creación del comando, que será coordinado desde la presidencia, Maduro señaló al gobierno de Donald Trump de haber “colocado a la DEA como organismo operador para atacar a Venezuela”, además de aprobar que “la CIA se involucre en operaciones encubiertas de carácter terrorista contra Venezuela”.

Por eso, “es importante tomar acciones tempranas (...) hemos activado (...) el puesto de comando de operaciones especiales, secreto, un puesto de comando de operaciones, con toda la capacidad de acción en cualquier lugar del país, en tiempo real las 24 horas”, indicó el mandatario durante una videoconferencia transmitida por la televisión gubernamental.

Le han dado la luz verde a la CIA para que venga con agentes directos a operaciones encubiertas, terroristas, contra objetivos petroleros, eléctricos, militares, electorales y otras acciones encubiertas, sucias como las que acostumbra la CIA en el mundo (...) ya capturamos a un agente que lo ha confesado, las acciones encubiertas”, aseguró el mandatario.

El pasado 11 de septiembre Maduro informó la detención de un “espía” estadounidense identificado como Matthew John Heath, que es procesado por la justicia venezolana por “terrorismo”, acusado de planear ataques contra instalaciones petroleras y eléctricas.

En agosto pasado, los estadounidenses Luke Alexander Denman y Airan Berry fueron condenados a 20 años de prisión en Venezuela, acusados por terrorismo, entre otros delitos, por una fallida incursión armada al país caribeño en mayo pasado llamada operación Gedeón.

Maduro añadió que se están “activando todos los mecanismos de inteligencia, de contrainteligencia” para “defender a Venezuela” en el camino a las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre, boicotedas por una treintena de partidos que conforman la mayoría opositora al considerarlas un “fraude”.

El mandatario convocó a los integrantes de la Milicia Bolivariana, un cuerpo integrado por 4,5 millones de civiles adscrito a la Fuerza Armada, considerada el principal sostén de su gobierno, a estar en “máxima alerta” ante posibles conspiraciones, llamado que extendió a la militancia oficialista.

Mas temprano, Diosdado Cabello, presidente de la Constituyente que rige al país y primer vicepresidente del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), pidió “informar de manera inmediata cualquier movimiento raro, de llegada de personas que no sean de las comunidades, que no tengan acento venezolano, si no acento extranjero”.

Esto “porque tenemos informaciones precisas que parte de las instrucciones dadas por el señor (Mike) Pompeo a los lacayos cercanos es traer a Venezuela la violencia de Colombia”, dijo Cabello al aludir una reciente gira del jefe de la diplomacia estadounidense por Sudamérica en la que insistió en la salida de Maduro.

Caracas con frecuencia acusa a Washington de estar detrás de complot para derrocar a Maduro. La Casa Blanca no reconoce al heredero del fallecido expresidente Hugo Chávez (1999-2013), luego que se reeligiera en mayo de 2018 para un segundo período en comicios “fraudulentos”.