Populismo total. Durante los últimos la invasión de terrenos destruyó el crecimiento armonioso de ciudades en el país. Mafias organizadas controlan por años este negocio pese a leyes existentes (DL 803, DL 1202, Ley 30230 y otras con el fin de controlar el desorden urbano generado por esta actividad lucrativa ilegal y que hizo ricos a varios en complicidad directa con autoridades regionales, locales y del gobierno central que alentaron su práctica informal).

Con el marco legal, en especial Ley 30076, castigando de manera ejemplar a traficantes de lotes y no reconociendo invasiones hasta el 2010, las ocupaciones pararon un poco al desbaratarse organizaciones criminales implicadas en este tipo de acciones y cuyos procesos avanzan lentamente o caminan al archivo del rincón de las ánimas existentes en juzgados salpicados por la corrupción.

En su último mensaje a la Nación, el presidente Martín Vizcarra, recurriendo a un lenguaje populista y desesperado, anunció la presentación de un proyecto de Ley de medidas complementarias para ampliar el plazo de formalización de predios invadidos hasta el 12 de julio del 2014 para titular a más de un millón de propiedades.

Una vez más se repite la sentencia: “invade y espera a que un populista te titule”.

En pocas palabras y como precisa María Murillo, experta en Derecho de Propiedad, ante similar intención advertida en marzo último: “Estaríamos dando visos de legalidad a nuevas invasiones de terrenos de propiedad privada, puesto a que, si ya hay una ley aprobada en el 2020 que te permite titular hasta el 2010, el invasor puede pensar que va a tener prórrogas cada vez que invada”.

Anuncios que solo fortalecen la informalidad e invasiones, alentando a perdurar y convirtiendo la actividad en necesidad pública, situación muy peligrosa.