Y ahora que las condiciones de lluvia para este verano van a ser normales, después de tantos años de incertidumbre, ¿qué van a decir los “niñologos”?, ¿que hay Niño neutro? Son capaces.

La estación de lluvias va a estar dentro de lo normal, por lo tanto debemos estar preparados para recibirlas y no esperar ver en la TV a gente explicando técnicamente lo que ya ocurrió, como son los trasvases en la sierra de Lima o las crecidas de los ríos de las cuencas medias y bajas de la costa norte. No se dejen sorprender con personas que digan que se viene algo inusual. Por eso se pierden grandes inversiones.

Lo más importante de estos eventos es dejar de bautizarlos, rebautizarlos y entrar en controversias solo por su clasificación, y prevenir con antelación prudencial (que es lo difícil) hasta llegar a la vigilancia del día a día, para así transformar los desastres naturales en beneficios. Solo depende de nosotros adaptarnos al clima, nunca esperemos lo contrario.

El planeamiento presupuestal del país, incluyendo al clima, debe ser básico para una nación que cuenta con casi todos los climas del mundo. Lamentablemente, nuestras autoridades que solicitan sus presupuestos, no toman en cuenta tan importante punto de análisis.

Se podría ahorrar vidas, tiempo y recursos sabiendo el comportamiento del clima del próximo año. Por ejemplo, para la distribución de las vacunas, los horarios de las clases en las zonas altas evitando el intenso frío, la extracción minera, el turismo y el transporte de alimentos con menor riesgo de accidentes. Solo basta decisión y una línea base para compararlo, partiendo desde una vigilancia estratégica del clima.