La presidenta Dina Boluarte anunció que mañana presentará el balance de los primeros seis meses de su gestión. Enfatizó que mostrará las medidas, inversiones sociales y los logros de su Gobierno. Aunque muchos dudan de este exceso de optimismo y de los buenos resultados de la mandataria, esperemos que su discurso sea productivo y realista. Ojalá no abuse de muletillas como aquella que recuerda que llegó a la presidencia como manda la Constitución (algo que es absolutamente cierto) y que la atacan porque es andina y mujer (algo que no se ajusta a la realidad).

Al inicio, Boluarte demostró impericia. Era evidente que su gobierno no sabía adónde quería ir, ni cómo acumular fuerzas para que se concreten sus buenas intenciones. Luego su gestión se enfrentó a protestas y a eventos trágicos en las manifestaciones. Pese a los embates de grupos extremistas, conservó el orden democrático y el estado de derecho. Hoy urge reactivar la economía y enfrentar las consecuencias de los desastres naturales, así como el brote de dengue en algunas regiones del país. Un gran pendiente no de este gobierno, sino de todos los anteriores, en la lucha contra la delincuencia. La inseguridad ciudadana no solo persistió durante su mandato, sino que se incrementó. Los altos índices de criminalidad generan preocupación y temor. Todos piden estrategias más efectivas para garantizar la seguridad de la población. Hay mucho por hacer.

TAGS RELACIONADOS