El Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (RENIEC) ha informado que 32 de los 43 partidos políticos inscritos tienen observaciones sobre la presunta validez de las firmas presentadas para lograr su inscripción ante el Registro de Organizaciones Políticas (ROF), dependiente del Jurado Nacional de Elecciones (JNE).
Estos partidos políticos mantienen su inscripción porque la Ley 30995 de agosto del 2019 estableció que estos hechos delictuosos no ocasionan la cancelación de la inscripción. Las personas, individualmente responsables, podrían ser denunciadas y procesadas penalmente, lo que no ocurre.
La verificación de las firmas de los adherentes está a cargo de RENIEC, mientras que la inscripción de los partidos es responsabilidad del JNE. Ambas instituciones evaden su responsabilidad teniendo como resultado fraude contra la voluntad popular.
Ante el descubrimiento de afiliación de miles de peruanos que aparecen como adherentes de los partidos, sin serlo, el JNE se ha limitado a exonerar el pago de la tasa de S/. 46.20 para desafiliarse. Mientras, la RENIEC alega que no tiene el presupuesto ni el amparo legal para hacer una verificación creíble.
Las “lavadas de manos” amparadas en medias verdades son parte de un fraude electoral, porque tanto el JNE y el RENIEC deben exigir que las firmas de los adherentes vayan acompañadas de la impresión de la huella digital, porque con ella sí es posible verificar la validez de las firmas.
Este fraude se configuraría con la participación y complicidad de los poderes del Estado, Ministerio Público y de los órganos electorales que se busca controlar.