Izquierda cómplice
Izquierda cómplice

Mientras algunos claman por una cacería de brujas contra autores y artistas de teatro, la inminente excarcelación de Peter Cárdenas y otros terroristas reafirma que seguimos perdiendo la lucha política contra el terrorismo. Y todo, “gracias” al “gran trabajo” de la izquierda peruana, desde caviares hasta rábanos.

De pronto, muchos se espantan de la paja de una obra de teatro a la que acusan de proterrorista, pero no quieren ver la viga de su inspiración. La cargan contra una ficción, cuyo contenido puede o no gustar, pero que sigue siendo ficción. Pero “La cautiva” no expresa nada que no haya sido expresado ya en el Informe de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación, que no es ficción y que es un documento oficialmente aceptado por el Estado peruano, como registro con categoría de “verdad histórica”.

La izquierda trabajó por años sigilosamente para la cosecha de hoy. Utilizó el pretexto de la corrupción del gobierno fujimorista para construir sigilosamente el andamiaje político-jurídico que hoy permite la liberación de terroristas y el reiterado intento del Movadef de participar en elecciones. Y en esta tarea, conseguir que se aceptara como verdad oficial la versión de los derrotados, plasmada en el Informe de la CVR, fue el gran triunfo izquierdista que sirvió de inspiración para todo lo demás.

Por tanto, desde la izquierda jamás se podrá hacer frente al terrorismo, porque comparten similares ideales de base, los mismos fundamentos. Siempre serán, aun sin proponérselo, sus protectores, sus apologistas soterrados. Incluso, cuando Sendero asesinó gente de la vieja Izquierda Unida, lo hizo por considerarlos tibios, no porque los sintieran distintos ideológicamente. La izquierda nunca fue víctima, siempre fue cómplice, aunque algunos izquierdistas, repetimos, genuinamente pudieran haber creído, de buena fe, que no lo eran.

Y cómo a algunos jóvenes bienintencionados los engatusan, permítanme ayudarlos con esta lógica elemental: 1) El Movadef es un movimiento de izquierda. 2) El brazo político-formal de Sendero es el Movadef. 3) Por tanto, Sendero es un grupo político - y terrorista- de izquierda. 4) Adicionalmente, la izquierda celebra la excarcelación de terroristas. A base de 1, 2, 3 y 4, preguntémonos si la izquierda peruana puede realmente ser freno y oposición a Sendero y al Movadef. Nunca, pues. Si algo tiene cuello largo como de jirafa, tiene manchas de jirafa, patas delgadas como jirafa y orejas chicas de jirafa, no va a ser nunca un elefante, ¿verdad? ¡Reaccionemos, peruanos!

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