El 2017, tras El Niño costero en el norte del país, PPK creó la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios (ARCC) con el objetivo de “liderar la planificación y programación conjunta de las intervenciones para la reconstrucción”, entre otras tareas. Visto el 2023 y el nuevo desastre en esa zona, ¿vale la pena que siga funcionando?

La única función de la ARCC era “articular las inversiones de las distintas entidades públicas en favor de la reconstrucción, monitorear que las intervenciones se ejecuten conforme la programación realizada y fortalecer las capacidades de los gobiernos regionales y locales”. Repito: ¿vale la pena que siga funcionando?

La principal misión de la ARCC es: “liderar el diseño, ejecución y supervisión de un plan integral para la rehabilitación, reposición, reconstrucción y construcción de la infraestructura de uso público comprometida como consecuencia del fenómeno climático”. Seis años después, cualquier norteño se pregunta: ¿vale la pena que siga funcionando?

Han pasado cerca de cuatro jefes de la ARCC y no han sabido qué hacer con los 20 mil millones de soles que tenía el Estado para ejecutar obras de impacto. A ellos se suman la ignorancia y la desidia de los gobernadores regionales y alcaldes provinciales y distritales de Tumbes, Piura, Lambayeque, La Libertad y Áncash, quienes no presentaron los expedientes para estos trabajos porque eran “muy costosos”.

La verdad es que la ARCC solo ha servido para darle empleo a decenas de altos funcionarios con remuneraciones que superan los 10000 soles mensuales, pero que no demuestran lo que valen en el campo. ¿Cómo es posible que haya gerentes regionales que no rinden resultados positivos y continúen en el puesto? Ojalá reaccionen.

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