Si alguien tenía dudas de que el Congreso se ha convertido en la chacra de Alianza para el Progreso (APP) y de César Acuña, su dueño, ahí tienen a su “hija política”, quien desde setiembre del año pasado gana más de 19 mil soles provenientes de las arcas del Estado, es decir, de nuestros bolsillos, en el llamado Centro de Modalidades Formativas, una oficina “engalanada” con un cuadro con el rostro del dueño del partido político que desde julio del 2023 maneja el Poder Legislativo.
Este partido no solo colocó a Jorge Luis Torres Saravia como jefe de la Oficina Legal y Constitucional del Congreso, cargo que ocupó hasta que fue acusado públicamente de violación sexual y de ser el responsable de una presunta red de prostitución dentro del propio Poder Legislativo, sino que ahora se sabe que ha puesto a Jackeline Yessenia Lozano Millones en la dependencia dedicada a captar a jóvenes para que hagan sus prácticas en el Parlamento luego de un proceso que evaluación que habría que ver qué tan objetivo es.
Según el dominical Cuarto Poder, la dama gana 19 mil soles, es decir, más que un congresista, aparte de los bonos y demás beneficios, todo por ser la “ahijada” de Acuña, cuyo rostro aparecía sonriente en la oficina en mención, como si se tratara de un local partidario o al menos un espacio usado por la bancada de su agrupación política. Cómo será esto de escandaloso, que la Presidencia del Congreso ya dispuso el retiro de este y otros rostros relacionados con partidos políticos.
El Congreso ha asegurado que Lozano Millones cuenta con título de abogada y el grado académico de magíster. También ha dicho que se viene la primera convocatoria de practicantes “a través de una universidad de prestigio del país”, para que entren al Poder Legislativo. Habría que ver de cuál se trata y por qué se eligió solo a una casa de estudios y no a otra. Sería escandaloso que se trate de una de las tres universidades de propiedad de la familia Acuña.
De otro lado, sería bueno saber qué dicen los congresistas de otras bancadas que con su pasividad, dejadez o complicidad con las andanzas de los encargados de manejar el Congreso, están favoreciendo a fortalecer el rechazo de los ciudadanos hacia ellos mismos. Algo deberían hacer, pues por culpa de los Acuña, que han convertido al Parlamento en su chacra y agencia de empleos, la gente en la calle los pone a todos en el mismo saco. ¿Así quieren ir a la reelección? Mejor piénsenlo dos veces.