El ministro de Educación, Morgan Quero, anunció que 3200 policías serán destinados a implementar el plan Retorno Seguro a Clases 2025. Estos agentes, según el titular del Minedu, resguardarán la entrada y salida de los colegios, especialmente los privados, para brindar seguridad a los menores que inician clases y a las instituciones que son blanco de amedrentamiento por parte de extorsionadores. Si bien la medida es destacable, cabe preguntarnos cómo se permitió que estos delitos crecieran hasta el punto de que las organizaciones criminales se sientan tan envalentonadas para atacar cualquier empresa que genere ingresos, sin importar si dañan a menores de edad o a personas inocentes. Otra pregunta evidente es si, como afirman el gobierno y el titular del Interior, Juan José Santiváñez, hay avances en la lucha contra la criminalidad, ¿por qué más de 400 colegios privados anunciaron que iniciarán clases de manera virtual por ser víctimas de extorsionadores que exigen pagos para no atentar contra ellos?Alguien miente, porque si todo está bien como dice el gobierno, ¿para qué se destina tanta fuerza policial para evitar estos ataques? Lo mejor sería que el Ejecutivo se sincere y reconozca que no puede garantizar la seguridad de los ciudadanos.