De la presencia de la mujer en FF.AA se puede escribir, con alegría, mucho; tarea pendiente es investigar este tema. Centraremos, por espacio, en damas oficiales. S. XX, último quinquenio, congresistas acogen y promueven el interés ciudadano relativo a mujeres accediendo a escuelas militares, formadas como cadetes y, al graduar, hiciesen carrera como oficiales. Impulso principal provino de Martha Chávez (presidente del Congreso), Luz Salgado, Martha Hildebrandt, Aurora Torrejón, María Espinoza, María Lozada, sumándose Beatriz Merino, Susana Díaz, Lourdes Flores y Ana Towsend, tramitando y aprobando necesarios soportes legales.
Ejército, Marina y Fuerza Aérea revisaron perfiles (ingresantes, oficiales), mallas curriculares, líneas de carrera (rotaciones, especialidades), infraestructura (áreas para damas), protocolos. No era simplemente decir “ingresen”, pues, lo hemos escrito antes, un poder militar requiere años de planificación e implementación gradual por objetivos; más aún en lo que respecta al principal recurso: personas que por décadas, conformarán el activo crucial de una fuerza militar.
Personas formadas, capacitadas para, grado militar por grado, ser gestores, planificadores, líderes de personas a las cuales guiar. Era necesario asimilar otras experiencias. Para ese momento, basta mencionar a profesionales como el contralmirante Luis Bernales Parodi, director de la Escuela Naval del Perú, y la vicealmirante Patricia Ann Tracey, directora general de personal de la Armada de los Estados Unidos.
Conocer años de avances, problemas, retrocesos, nuevos bríos, mejorando el camino que, iniciado cuando las primeras damas ingresaron a las Escuelas de oficiales, permite observar con admiración a destacadas oficiales desempeñándose en todo ámbito de la estructura militar para, en pocos años, tener a las primeras coroneles en Ejército y Fuerza Aérea o capitanes de navío en Marina. Años de esfuerzo, dedicación, estudio y experiencia pronto nos permitirá contar con más de una señora general o almirante, cuyo norte es contribuir desde la Defensa Nacional al bienestar de cada peruano.