Es sabido que aún no es posible predecir la ocurrencia de sismos; sin embargo, la sismología está haciendo uso del avance logrado en el conocimiento sismológico, el desarrollo tecnológico y los modernos medios de comunicación, para proponer una alternativa técnico-científica para salvar vidas cuando ocurra un sismo de gran magnitud. Me refiero a los sistemas de alerta temprana de sismos, que en el Perú reciben el nombre de “Sistema de Alerta Sísmica Peruano” más conocido como SASPe.

Este proyecto hecho por peruanos para los peruanos, considera la instalación de 106 sensores a lo largo de la zona costera y en algunas islas del Perú, a fin de registrar los grandes sismos y emitir alertas para prevenir a la población el momento en que será afectada por el sacudimiento del suelo producto de la llegada de las ondas sísmicas.

Este procedimiento, brindará a los peruanos a lo largo de la zona costera valiosos segundos para salir a campo abierto o ubicarse en puntos seguros en el interior de sus viviendas. Pero, para que el SASPe funcione acertadamente, se requiere del apoyo incondicional de las autoridades locales, a fin de contar con todas las facilidades logísticas para instalar los sensores en sus jurisdicciones y ser parte de la familia SASPe.

A la fecha ya hemos firmado importantes convenios de cooperación entre el IGP y varias municipalidades e instituciones de investigación, pero para concluir con los objetivos debemos seguir contando con este apoyo.

Considerando que los sismos son cíclicos en el tiempo y la manera como han crecido las ciudades e incrementado la población, el SASPe es la mejor alternativa que el Estado Peruano, de la mano del IGP, pone al servicio de toda la población peruana y solo trabajando en conjunto lograremos reducir el número de personas afectadas cuando vaya a ocurrir el próximo gran sismo en nuestro país.

En el IGP seguimos realizando “Ciencia para protegernos, Ciencia para avanzar”.