En Uchiza los terroristas fusilaron y dinamitaron a tres oficiales de la policía heridos. Sucedió hace más de 25 años y mucha gente ya no recuerda hasta dónde llegó la brutalidad de los terroristas. Qué sirva para mantener viva su memoria.

Por Gastón Gaviola ()

Vamos a hacer memoria. Vi como muchos la vieron la entrevista a Peter Cárdenas y a los chicos que confundían a Gabriel García Márquez con Abimael Guzmán, y me acordé del ataque al puesto policial de Uchiza. Fue en 1989 y no me acuerdo porque lo vi en las noticias de esos días. Lo tengo metido hasta hoy en la cabeza porque me lo contaron mi papá y mi mamá un día a la hora del desayuno. Calculo que con los hechos todavía frescos. Fue un ataque terrorista de Sendero. Se calcula que unos 300 subversivos cayeron sobre el local policial. Los policías eran 10 veces menos. Mataron a 10 e hirieron a otros 14. De eso último me acuerdo ahora, que he vuelto a ver el caso.

Lo recuerdo por lo que me contaron mis papás, insisto. Porque me impresionó la crueldad. Que a los oficiales rendidos los amarraron a un árbol, me decían, y cambiaban miradas entre ellos mientras nos contaban a mis hermanos menores y a mí, a ver hasta dónde podían o debían llegar con la historia. Les pidieron a los uniformados sobrevivientes que se pasen a las filas de Sendero y ninguno aceptó.

Luego les ataron cartuchos de dinamita al cuello, debajo de la quijada (es lo que más recuerdo, porque tengo grabado el gesto de mi mamá, con sus manos, explicando cómo hicieron). Les pusieron mecha lenta, nos decía, para que dure más tiempo su sufrimiento. Luego los volaron.

Puse algo de eso en mi tuiter y  tuvo la gentileza de pasarme  sobre el tema. Lo leí a ver si mis recuerdos no estaba deformados por los años que pasaron dormidos y que escuchando al emerretista Cárdena, ting, saltó. Aquí les dejo unos extractos:

“Luego identificaron al Mayor PNP (GC) Carlos Farfán Correa, Capitán PNP (PIP) Walker Moscoso Carrera y Alférez PNP (GR) Walter Rengifo López. (...) Los citados oficiales fueron atados de manos y conducidos al centro de la plaza de armas donde los acusaron de ser “burgueses” y tener “información que otorgar”, que los suboficiales desconocían.(...) Héctor Aponte Sinarahua, “camarada Clay”, quien dirigió la acción armada, ha sostenido que “Ormeño” (identificado por la DIRCOTE como José Arcela Chiroque) o “camarada Alfredo” fue quien disparó contra los oficiales, luego de la parodia denominada 'juicio popular'”

“(...) fueron trasladados a un extremo de la plaza de armas, donde los sometieron a “juicio popular” durante el cual les requirieron rendirse públicamente y proporcionar informaciones. Ante su negativa fueron ejecutados con armas de fuego y explosivos en presencia de los pobladores”.

El informe no menciona lo de la dinamita atada a su cuello y las mechas lentas subiendo por su cuerpo, como a mis padres nos lo contaron.

Es todo. A veces las conversaciones caseras a la hora del desayuno te vienen a buscar más de 25 años después.

. El horror de la guerra que estamos empezando a olvidar.

.

Terrorismo nunca más.