Acantilados de Costa Verde podrían caer

Gran parte de los acantilados de la Costa Verde podrían caer debido a que las rocas que existen en ella se están deslizando por acción de los fuertes vientos que existen en la zona y también por un posible tsunami.

Así lo alertó el especialista en Gestión del Riesgo de Desastres y Procesos de Defensa Civil, Luis Luna Renteros, quien señaló que esto ocurriría de igual modo por un sismo mayor a 8 grados, que gastaría las bases del acantilado y traería abajo los edificios que están construidos encima del talud.

"No podemos prever esta situación, pero si eso sucede, la Costa Verde podría ser la tumba de miles de limeños", manifestó a Correo.

alertas. Luna Renteros explicó que el talud actual está hecho de un material considerado por los expertos como riesgoso y peligroso.

"Este ha sido modificado de su forma natural (piramidal) a una forma recta, lo que ha ocasionado que se produzcan deslizamientos de rocas y arena en forma constante", aseveró.

se salvan. Según el especialista, una de las zonas que se salvaría de una caída segura sería Larcomar, porque esta construcción está hecha por pisos y no encima del acantilado.

Tras un recorrido por el lugar, Correo comprobó que solo el distrito de San Miguel está preparado ante la caída de rocas porque en sus tres kilómetros de bahía existen mallas, geomallas y plantaciones de "campanillas", que hacen que las piedras no caigan a la pista.

Para Luis Luna, los cinco distritos que abarca este circuito de playas no respetan los acuerdos sobre su mantenimiento y preservación.

"Lo que se dictaminó cuando se hizo la Costa Verde fue dejar seis metros de espacio entre el acantilado y los vehículos. Para que los accidentes no se sigan produciendo, se tendría que dejar espacios entre el talud y los carros. Para que se dé esta medida, tendrían que pasar varios años, algo que la autoridad del Proyecto Costa Verde no hará", apuntó.