Agricultores afectados por el cierre de La Parada
Agricultores afectados por el cierre de La Parada

Tras el violento desalojo de los vendedores mayoristas de La Parada, la situación de estos comerciantes se agrava, debido a que no cuentan con un lugar fijo para realizar sus ventas. A la fecha, estas han disminuido en un 60%. Dicho panorama también afecta a los productores agrarios, quienes evalúan la posibilidad de no sembrar en la próxima cosecha, pues no hay la demanda de comienzos de año.

"Los mayoristas no pueden garantizar a los productores un precio que les permita brindarles seguridad. Las ventas han caído en forma alarmante y los agricultores ven que sus productos no tienen un lugar de venta seguro", indicó a Correo.

Según el vocero de los concesionarios de La Parada, Manuel Rojas Flores, el cierre de las vías de acceso al mercado La Parada podría ocasionar una fuerte escasez escalonada de papas, cebollas, arvejas, tomates y otras hortalizas en los meses de febrero y marzo, debido a que se ha alterado seriamente el circuito económico entre productores, transportistas, mayoristas y minoristas.

ESCASEZ. Esto originará que en unos meses los agricultores consideren seriamente la posibilidad de dejar de sembrar, porque no tienen garantía de que obtendrán la paga por sus productos.

"Con La Parada todo tenía un funcionamiento y un costo. Había una relación directa, de confianza, entre el productor y el mayorista, que ahora no existe porque nadie puede garantizar un volumen de venta", refirió Manuel Rojas.

"Ahora estamos vendiendo en diferentes puntos de Lima. Unos están en Comas, Puente Piedra y Villa El Salvador, entre otros lugares... No tenemos un lugar fijo donde vender; trabajamos como ambulantes", anotó.

Sostuvo también que los agricultores se apoyan en los mayoristas. Al no tener un punto de venta, se rompe esa relación y distribuyen su producto en cualquier lugar.

"Al haber esa inseguridad, el productor ya no va a sembrar. Y se generará la escasez. Todo generado por el mal llamado 'traslado' a Santa Anita", explicó Rojas Flores.

"Al no haber un pago adecuado, porque todo tiene un costo de producción, si no se cubre ese costo, el agricultor no tiene por qué sembrar. Puede sembrar maíz o algodón, que es más seguro, pero los perecibles, tomate, papa, para la casa, para la mesa, no", agregó