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Tocó una y hasta tres veces la puerta del Penal de Varones del , ubicado en Socabaya - , para que lo encarcelen. Cuando por fin le abrieron, agachó la cabeza y exclamó: “maté a mi esposa, vengo a entregarme”.

Fue el vigilante del Icras quien derivó al arrepentido hacia la comisaría de Acequia Alta - Arequipa, donde confesó su crimen. Los policías fueron a la vivienda donde hallaron el cadáver. La declaración era cierta.

David Alferes Challa tiene 30 años y, cegado por los celos, atacó a su expareja y madre de sus dos hijos, Victoria Sulca, la mañana del jueves, en su vivienda. Luego llevó a sus dos hijos a la casa de su hermana, donde los dejó para horas después intentar entregarse en la cárcel del Inpe.

PROTESTA. “Mi tía me dijo días atrás que él la había amenazado, que la acusaba de estar con otro hombre; le había dicho: te voy a matar”, contó Rubí Pallo Sulca, la sobrina de Victoria.

Siempre la golpeaba, le decía: te voy a matar, te voy a matar. Yo pensaba que lo decía para amedrentarla, hasta que lo hizo”", contó entre sollozos Adela Sulca, una hermana de la víctima.

Parados frente a la morgue y con carteles en mano, los indignados familiares y amigos de Victoria pidieron ayer que David Flores sea sancionado con la máxima pena: cadena perpetua. “Dejó a sus hijos desamparados y quiere utilizar la confesión sincera para bajar sus años de cárcel” del Inpe, gritaban.

David espera detenido el desenlace de su historia.

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