No tuvieron misericordia. Una niña de solo diez años fue acribillada junto a su padre, en Barrios Altos, en un aparente ajuste de cuentas en el que el objetivo era su progenitor.

Eran aproximadamente las 20.30 horas del último lunes cuando Óscar Eduardo Gonzales Loayza, conocido como "Culi Culi", se desplazaba a bordo del auto Chevrolet azul oscuro de placa A4U-295.

En el asiento del copiloto viajaba su hija Adriana G. P. (10), a quien había recogido de sus clases particulares de matemática, e iban hasta la casa donde vivían, en la primera cuadra de la calle La Mar en el Cercado.

EL ATENTADO

Al llegar a la cuadra dos del jirón Lucanas, Barrios Altos, el vehículo fue interceptado por dos motos lineales desde las cuales unos sujetos les dispararon sin importarles la presencia de la menor. Luego huyeron.

mientras que su progenitor recibió cinco tiros.

Vecinos y peatones que circulaban por la mencionada calle corrieron hacia el vehículo para ver lo que había ocurrido.

"Ayúdennos por favor. Ayuden a mi hija; a mi hija por favor", pidió desesperado Gonzales Loayza al ver a su pequeña bañada en sangre, pues los balazos la habían herido mortalmente.

Padre e hija fueron trasladados al Hospital Dos de Mayo, donde la menor dejó de existir.

Su progenitor quedó internado debido a sus graves heridas. Se debate entre la vida y la muerte.

AMENAZAS

La madre de la menor, Gaudier Paz Aquije, protagonizó desgarradoras escenas de dolor tras enterarse de la terrible noticia.

La mujer aseguró que no veía a su hija desde el pasado Día de La Madre, fecha en que su expareja se la arrebató con engaños y bajo amenazas de golpearla, le prohibía buscar a su única hija.

Detalló que sabía que el padre de Adriana estaba amenazado de muerte porque tendría vínculos con mafias de construcción civil.

"No entiendo por qué salió con mi hija si sabía que estaba con problemas. ¿Por qué salió con ella?", se preguntaba la mujer en medio de lágrimas.

Luego agregó: "Estoy muerta en vida, me han quitado la razón de vivir. Estoy destrozada", dijo Paz Aquije mientras recibía el consuelo de sus familiares.

La menor será velada en un local del Rímac.

VÍNCULOS

Óscar Eduardo Gonzales Loayza sería dirigente del Sindicato de Construcción Civil de Barrios Altos.

Trascendió que habría tenido amistad con el prontuariado delincuente Milton Carlos Romaní Naveda (44), "Cabezón" o "Cholo Romaní", quien fue asesinado a balazos en una pelea con sus similares de La Victoria, en el 2009.

Fuentes policiales indicaron que estaba vinculado en las invasiones de tierras, extorsiones y en proporcionar "seguridad" a las obras que se realizaban en Barrios Altos.

"Eso había originado que se hiciera de varios enemigos", detalló el informante.

Trascendió que hace dos años, Gonzales Loayza también habría sufrido un ataque a balazos, pero milagrosamente salvó de morir.

"Solo él sabe quienes estarían detrás del ataque que sufrió el último lunes, en el cual murió su menor hija. Se espera que pronto dé información necesaria para identificar y capturar a los responsables de la muerte de su hija", apuntó la fuente.