Banda engañaba a empleadas del hogar para robar en casas

Con el cuento de organizarle una fiesta sorpresa al hermano de su patrón, una empleada doméstica fue estafada por delincuentes a quienes entregó joyas y electrodomésticos valorizados en diez mil dólares.

“Un hombre llamó por teléfono a la casa y dijo que era el hermano de mi patrón y que por su cumpleaños iba hacer una fiesta sorpresa, por eso necesitaba unas cosas. Una señorita iba a pasar por la casa para que recoja todo el pedido”, narró Graciela Garrido a la Policía Nacional.

Desde rejas. Sin embargo, agentes de la División de Investigación de Robos de la Dirincri ya estaban tras los pasos de esa banda, “Los terribles de Villa”, que operaba desde un penal.

Tras recibir la denuncia de la agraviada, se montó un operativo y se capturó a Brigith Ángela Ñavincopa Páucar (20), “Brigith”, cuando descendía de un taxi, en la cuadra ocho de la avenida Guillermo Dansey, en el Cercado de Lima.

“Se le encontraron las pertenencias de su víctima y ketes de PBC”, reveló la Policía.

El rol que cumplía la mujer en esta banda era ir a las casas para recoger lo que se había pedido por teléfono a las incautas mucamas.

“La banda operaba con el cuento de las llamadas telefónicas. Se hacían pasar como sus jefes o familiares de ellos para apoderarse de cuantiosos objetos de valor”, informó el jefe de la División de Investigación de Robos, coronel PNP José Garay.

Los objetos robados eran vendidos en “La Cachina” y otros mercados informales. El cabecilla de la banda, que realizaba llamadas a las casas para estafar a empleadas, está preso por robo agravado y homicidio.

La banda cometía sus atracos en exclusivas zonas residenciales de San Borja, Miraflores y Surco.

La Policía Nacional está tras los pasos de los otros miembros del grupo.

El dueño de la casa del último robo, Luis Alberto Chuyes Ruiz, agradeció a la División de Robos de la Dirincri por la captura. “Gracias a la Policía por capturar a esta mujer que estafó a mi empleada”, dijo.