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El cadáver de A.E.G.Q. , de un año y diez meses de edad, fue hallado dentro de una maleta de cuero en el interior del stand 198 del Centro Artesanal Cusco, en el distrito de Wanchaq, tras estar dos días desaparecido. El asesino confeso fue identificado como Luis Enrique Umeres Champi (35), tío de la víctima.

MALETA. Aidé Quispe Gallegos y Fredy Grovas Salas, padres del difunto niño, reportaron su desaparición el último domingo, sin imaginar que su pequeño estaría a pocos metros del stand donde tienen un negocio de artesanías. Al revisar las cámaras de seguridad instaladas en el mercado, observaron que al promediar las 14.30 horas del día de su desaparición, el pequeño ingresó al stand del establecimiento comercial perteneciente a Umeres Champi y nunca salió. Los agentes del orden lograron intervenir el puesto y, tras inspeccionar el recinto, encontraron una maleta marrón que se exhibía en la parte superior de un estante, lista para ser vendida. En ella estaba el inerte cuerpo del pequeño. El cuñado de la madre de la víctima fue detenido en su domicilio, en el distrito de San Sebastián. El asesino optó por acogerse a la confesión sincera. “El niño entró al stand y tropezó con una figura de cerámica. Se privó. Lo agarré y quise taparle la boca. Traté de callarlo, en sí asfixiarlo, con más presión”, detalló el homicida. El pequeño fue hallado con sangre en el rostro y lesiones en la garganta. En tanto, los familiares solicitaron pronta justicia. “Yo quiero que le den cadena perpetua al asesino de mi nieto”, exigió el abuelo del menor, Bernabé Grovas Loayza. Mientras tanto, el detenido fue trasladado al penal de Quencoro.